Evander Holyfield, el único boxeador que ganó cuatro veces el título mundial de peso completo, fue saludado con una ovación de pie el domingo en su exaltación al Salón de la fama del Boxeo Internacional.
Holyfield acentuó el momento con un sentido discurso que se enfocó en las significativas contribuciones que realizaron su madre y sus hermanos durante su larga carrera.
"Esto del Salón de la Fama es todo debido a la ayuda que recibí de alguien más", dijo Holyfield, el más chico de nueve hijos. "Mi madre estaría tan feliz".
La impresionante carrera de Holyfield se extendió más de tres décadas e incluyó una medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de 1984, títulos indiscutidos en los pesos crucero y pesado, así como dos peleas memorables contra Mike Tyson y otra contra Riddick Bowe. Tuvo un récord amateur de 160-14 con 75 nocauts y terminó su carrera profesional con marca de 44-10-2 con 29 nocauts.
El domingo, el recuerdo de su madre, Annie, quien murió en la década de los 90, tomó el centro del escenario.
"Cuando regresé con la medalla de bronce, mi mamá dijo, 'ves, te dije'. Mi mamá no dejaba que me rindiera", recordó Holyfield. "Mi mamá decía, ‘independientemente de lo bueno que seas, lo puedes arruinar, y si lo arruinas y tiene una buena actitud, obtendrás más oportunidades. Tuve diez tropiezos, eso les permite saber que yo lo arruiné. Pero debido a la buena actitud que tuve, conseguí más oportunidades".
"Mi objetivo fue ser el mejor que pudiera. Simplemente no sabía lo que eso era".
También fueron exaltados el mexicano Marco Antonio Barrera, campeón mundial en tres divisiones; el fallecido campeón súper mosca Johnny Tapia; el entrenador australiano Johnny Lewis; el juez Jerry Roth; el periodista y cronista radiofónico Steve Farhood; el cronista radiofónico Barry Tompkins; y Eddie Booker y el anunciador de ring Jimmy Lennon padre también fueron honrados póstumamente.