Óscar de la Hoya asegura que la pelea de Canelo Álvarez y Julio César Chávez Jr. será una bocanada de aire fresco y necesario para el mundo del boxeo. Está tan seguro de que será una gran pelea, que piensa en que este combate del 6 de mayo en la T-Mobile Arena de Las Vegas va a regresarle al boxeo la atención que merece y le dará al boxeo un nuevo ídolo.
La expectativa por este pleito es tan grande que de acuerdo con el 'Golden Boy' sólo quedaban cerca de mil boletos disponibles, los cuales esperaban que se vendieran para el fin de semana. De acuerdo a una fuente, el aforo en la instalación es para 22 mil personas y no para 20 mil.
"Siento una rivalidad como la de Marco Barrera y Érik Morales, esa rivalidad se siente entre Canelo y Chávez, pero además, el ganador se va a convertir en el ídolo mexicano y se establecerá como la atracción del boxeo mundial, que es una posición que ya ocupa Canelo, pero esta pelea lo llevará a otro nivel, porque esperamos vender bastantes pagos por evento y ya sólo nos faltan mil boletos para el 'Sold Out'", apuntó Óscar a ESPN.
"Esta es una pelea que va a estar vendida esta misma semana y eso es una indicación de que la gente está interesada en esta pelea y sabe que esta pelea le vendrá bien al boxeo. Para mí el hecho de que estén casi todos (los boletos) vendidos es una indicación de las ganas que tiene la gente por esta pelea, porque siempre cuando hay dos mexicanos en el ring hay guerra", destacó el excampeón del mundo.
De la Hoya reconoció que cuando se combate con uno de su misma filosofía (la del guerrero azteca), cuando se enfrenta a uno de la misma nación, no hay forma de que uno no pueda entregar el todo. "No puedes perder con un paisano. Como mexicoamericanos me tocó con Fernando Vargas, con Rafael Ruelas, con 'Chicanito' Hernández, todo es más personal cuando se enfrenta a alguien de la misma raza (…), y es porque hay mucho orgullo en juego, mucha patria", culminó el también el campeón olímpico en Barcelona 1992.