Cuando a los Astros les urgía el sábado en el Juego 2 de la Serie Mundial grandes aportes más que en cualquier momento esta campaña — enfrentando la posibilidad de tener que viajar a Filadelfia abajo 0-2 en el Clásico de Otoño — el venezolano José Altuve no sólo encabezó la alineación. También fue el líder.
Contra el primer pitcheo que vio del abridor de los Filis, Zack Wheeler, Altuve pegó un doblete y no pasó mucho tiempo para que la escuadra de Houston tomara una ventaja de 3-0 rumbo a su victoria por 5-2 para empatar la serie.
El antesalista Alex Bregman, quien dio un jonrón clave en el triunfo de los Astros más adelante en el partido, dijo lo siguiente sobre el impacto que causó sobre el equipo el comienzo de Altuve:
“Creo que ese swing para iniciar el partido entusiasmó al público, llenó de energía al dugout, puso en marcha a nuestra ofensiva”.
Altuve, quien ha tenido impresionantes postemporadas durante su carrera, de alguna manera comenzó los playoffs de este año bateando de 25-0. Pero eso no afectó a los Astros en su barrida sobre los Marineros en la Serie Divisional, ni cuando sacaron las escobas contra los Yankees en la Serie de Campeonato. Luego Altuve lentamente comenzó a entrar en ritmo, y de cara al encuentro del sábado, había pegado cuatro imparables en 12 turnos. Luego sacudió tres hits en el Juego 2. Lo logró en un choque de octubre de gran importancia como lo ha hecho tantas veces en su carrera, y el infielder les recordó a todos de algo, como si fuera necesario a estas alturas de su carrera:
Que ha sido uno de los mejores jugadores de su momento, y uno de los mejores intermedistas en la historia.
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Los Astros han contado con varias estrellas durante la estadía de Altuve en Houston. El cubano Yordan Álvarez fue la mayor con el bate durante esta temporada regular, y luego le dio dos victorias a Houston sobre Seattle con dos dramáticos cuadrangulares. Pero Altuve, quien cumplió 32 años en mayo, ha sido su mayor figura durante un buen tiempo, y lo demostró otra vez en el Juego 2.
El último imparable de Altuve en el Juego 2 fue contra un pitcheo a la altura de sus ojos que llegó hacia la pradera derecha. En ese momento, pasó de batear .000 en el inicio de octubre a tener promedio de .444 en los primeros dos partidos de la Serie Mundial.
“A comienzos de los playoffs, estaba dándole swing a todo y luego lentamente estaba esperando mis pitcheos”, explicó Altuve después del compromiso. “También di un batazo contra un lanzamiento casi a la altura de mi cabeza. Pero fue un hit, entonces fue algo bueno”.
Lance McCullers Jr., otro compañero de Altuve por un buen tiempo, dijo lo que siempre ha señalado sobre Altuve: “Es el corazón del este equipo”.
Nada ha frenado Altuve. Otra vez bateó .300 esta campaña. Pegó 28 jonrones. Álvarez fue segundo en todo el béisbol con OPS de 1.019. Altuve discretamente fue cuarto con .921. En ocasiones algunos se olvidan, puede ser porque lo ha hecho por tanto tiempo, lo bueno que Altuve es a este nivel, y lo divertido que es verlo.
“Nunca he dudado en mis capacidades”, declaró Altuve en un momento. “No me importó mi estatura. Sólo quería ser uno de los mejores
Ha cumplido con dicha meta. Ha ganado dos títulos de bateo y ha bateado al menos .300 en seis ocasiones. Su promedio de por vida es .307. Tras la acción del sábado, en la postemporada batea .273, lleva 23 bambinazos en octubre y su próximo imparable será su número 100 en dicha etapa. Además, por su estatura y por lo joven que se ve, Altuve parece seguir siendo una de las figuras más reconocidas en el béisbol.
Nadie se ha olvidado de lo que hicieron los Astros en el 2017, incluso ahora que siguen ganando. Altuve y sus compañeros siempre lo sabrán cuando jueguen en Nueva York y en Los Ángeles. Pero el conjunto tiene la misma personalidad que el primer bate en la alineación del dirigente Dusty Baker y que defiende la segunda base: Nunca se dan por vencidos.
Esta se perfila a ser una inolvidable Serie Mundial, y la intensidad aumentará el lunes cuando se dispute el Juego 3 en Filadelfia. Pero a los Astros les urgía ganar el sábado. José Altuve fue la pieza clave para que lo lograran, desde el primer pitcheo que vio. Los grandes jugadores siempre hacen grandes cosas.
Tomado de Mike Lupica de MLB.com
