Beltrán con los Mets: “estoy orgulloso de mis raíces”

“Recibimos los textos de mis hermanos diciendo ‘vamos a comprar los boletos para la serie en Puerto Rico‘. Pero ¿cuál serie? Es algo bien especial, porque también será en la semana que Carlos cumplirá (43) años”, señaló.

Beltrán es el primer piloto latino en la historia de la franquicia y su contratación _con un acuerdo de tres años que incluye una opción del club para otra temporada_ elevó a cuatro el número de dirigentes puertorriqueños en Grandes Ligas.

“Estoy orgulloso de mis raíces, de lo que he vivido en mi vida, de lo bueno y lo malo”, comentó Beltrán. “Todo es un aprendizaje”.

Aprendizaje y comunicación. Esas fueron las palabras que más destacaron durante la rueda de prensa en el Citi Field para la presentación oficial de Beltrán, quien apenas hace dos años se retiró y no tiene experiencia alguna dirigiendo en ligas mayores.

Tras un proceso que tomó un mes e incluyó cinco entrevistas, Beltrán emergió por encima de candidatos con reconocida trayectoria. Uno de ellos fue Joe Girardi, campeón de la Serie Mundial de 2009 con los vecinos Yanquis y que acabó aceptando una oferta para conducir a los Filis de Filadelfia, rivales de los Mets en la División Este de la Liga Nacional.

Seducidos por el pasado de Beltrán en la organización y una reputación de tener buenos dotes de comunicación, los Mets optaron por el boricua.

Eso ha sido un problema reciente en un equipo cuyo último campeonato de la Serie Mundial se remonta a 1986.

Mickey Callaway, el predecesor de Beltrán, fue multado por el equipo tras insultar a un reportero. El pitcher estelar Noah Syndergaard se irritó cuando se filtró que había planteado su deseo de tener a Wilson Ramos como su receptor. Y trascendió en los medios un incidente en que el gerente Brodie Van Wagenen arrojó una silla al reaccionar frustrado durante una reunión con los coaches.

Beltrán tiene claro que hay que llevarse bien con todo el mundo, empezando con su jefe: “Cuando eres el manager, el gerente tiene que ser tu mejor amigo”.

Van Wagenen, por su parte, enumeró cinco atributos sobre lo que convenció a los jerarcas del club a encomendar el puesto a alguien que fue seleccionado al Juego de Estrellas en nueve ocasiones a lo largo de una carrera de 20 campañas: aplomo, honradez, disponibilidad para aprender, compromiso por ganar y comprensivo con los jugadores.

“Para todos nosotros, desde los dueños y los responsables de las operaciones de béisbol, es importante poder respirar con calmar cuando toque reunirse con el manager en su oficina”, dijo Van Wagenen. “Queremos sentirnos tranquilos, sentirnos bienvenidos y poder tener una buena sociedad con el manager. Podemos confiar en Carlos”.

Tras retirarse como pelotero en 2017, Beltrán fue considerado para llenar la vacante de manager de los Yanquis. Acabó como asesor especial de ese equipo, trabajando de cerca con el gerente general Brian Cashman. ¿Su tarea? Canalizar la información estadística de los expertos del equipo con el personal en el camerino.

Al volver a Queens, Beltrán se colocó la franela de rayas azules de los Mets y lució el número 15, el mismo que tuvo cuando formó parte previamente del equipo.

Dirigirá a un talentoso grupo, destacándose el toletero Pete Alonso, quien fijó el récord de jonrones para un novato en la pasada temporada y el pitcher Jacob DeGrom (ganador del Cy Young en 2018).

Aunque los Mets resurgieron en la segunda mitad, sus 86 victorias no alcanzaron para evitar quedar fuera de la postemporada por 11ma vez en los últimos 13 años. Callaway fue despedido tras acumular una marca de 163-161 en sus dos años al frente.

Beltrán mencionó que consultó con otros jugadores que recientemente dieron el salto al trabajo de manager, como su compatriota Alex Cora con Boston y Aaron Boone de los Yanquis.

“Me aconsejaron ‘tienes que ser tú, ten confianza, habla de lo que tú sabes‘”, contó. “No todas las cosas en la vida se saben, uno tiene que estar dispuesto a aprenderlas. Fui honesto, fui claro con las cosas que quiero implementar, cómo veo el equipo. Las cosas que hay cambiar para mejorar el ambiente. Lo más importante es relacionarte con los jugadores”.

Beltrán añadió que buscará contar con un grupo de coaches que complementará su falta de experiencia.

“Admito que necesito experiencia”, dijo. “Vamos a contactar gente con experiencia… No busco gente con nombres reconocidos. Quiero gente que sea entusiasta”.

Durante la rueda de prensa, la voz de Beltrán se entrecortó al hablar sobre sus padres y de la academia que fundó en Puerto Rico.

“A los jóvenes de la escuela de béisbol, los quiero mucho. Sigan trabajando fuerte, luchen por sus sueños. Honestamente, todo es posible”, subrayó. “Si yo pude lograrlo, pónganse eso en su mente, que ustedes pueden lograrlo”.

Beltrán se une a Cora, Charlie Montoyo (Toronto) y Dave Martínez (Washington) como los managers boricuas activos en las mayores. Cora y Martínez se coronaron campeones en las últimas dos ediciones de la Serie Mundial.

Omar Minaya, el gerente que fichó a Beltrán como agente libre antes de la campaña de 2005 y ahora asesor de Van Wagenen, sonrió sobre la posibilidad de un tercero.

“No fue un factor que entró, pero esperamos que la tendencia siga el año que viene”, dijo.