Gerrit Cole, Max Scherzer y una colección de ases pondrán en marcha la Serie Mundial en Houston, para luego trasladarla no lejos de la loma donde se erige el Capitolio.
Con Justin Verlander, Stephen Strasburg y todos esos brazos dominantes en acción, debería darse otro nombre a la sede del Congreso federal.
Y es que en este Año del Jonrón, el énfasis en el Clásico de Otoño de 2019 está en el montículo.
Un duelo que promete ser memorable, quizás.
“Conozco a unos cuantos de los muchachos en su rotación y personalmente estoy excitado de que estén en esta posición, y muy excitado de llegar allí”, dijo Cole el sábado por la noche.
El duelo tiene un giro curioso: Los Astros y los Nacionales de Washington comparten un complejo de entrenamientos en la primavera _ se enfrentaron al arrancar la pretemporada en febrero y Scherzer le permitió un jonrón al primer bateador del partido.
Ahora, ocho meses más tarde, se enfrenten en serio, a partir del martes por la noche en Houston. Los Astros, que ganaron 107 partidos en la campaña regular, tratan de llevarse su segunda corona en tres años. Los Nacionales debutan en la Serie Mundial.
Houston abre como favorito 2-1 en las apuestas.
Cole será abridor del primer juego, seguido por Verlander y Zack Greinke.
“Tenemos unos cuantos que lanzan bien”, dijo el manager AJ Hinch.
Lo mismo se puede decir de los Nacionales, con una rotación de Scherzer, Strasburg y Patrick Corbin. E incluso el venezolano Aníbal Sánchez — que en los playoffs llevó un juego sin hits hasta el octavo inning.
No se puede olvidar a los bateadores en la serie: José Altuve, Jugador Más Valioso de la serie de campeonato tras su decisivo jonrón en el sexto juego contra los Yanquis; así como Alex Bregman y Anthony Rendón — candidatos al MVP de la campaña regular; George Springer y los torpederos Trea Turner y Carlos Correa.
Aparte de novatos como Juan Soto y Yordan Álvarez.
Pero en una era en la que los equipos buscan nuevas estrategias de pitcheo — vea el desfile de relevistas de los Astros en el sexto juego de la serie de campeonato — los dos clubes casi seguramente dependerán mucho de sus abridores.
Y eso no le molesta a Hinch.
“Filosóficamente, ya sea la nueva idea de usar un relevista para abrir por un par de innings o sacar a los abridores cuando enfrentan la alineación por tercera vez, la mayoría de quienes lo respaldan no tienen a Verlander o Cole en su equipo”, dijo.
Los Astros, que comenzaron en la Liga Nacional como los Colt .45s en 1962, encabezaron las mayores en victorias en la campaña regular. Su camino en los playoffs fue más arduo, venciendo al comodín Tampa Bay en el partido decisivo de la serie divisional de la Americana y entonces a los Yanquis en el sexto de serie de campeonato con el jonrón de Altuve en el noveno inning contra los Yanquis.
“Ya ganamos una Serie mundial y fue un sueño hecho, pero para mí las cosas son todavía mejor cuando pasan dos veces”, dijo Altuve. “Creo que grandes cosas nos esperan”.
Los Nacionales, que comenzaron como los Expos de Montreal en 1969, tomaron la ruta inversa.
Tras haber dejado ir al toletero Bryce Harper como agente libre, los Nats estaban apenas 19-31 en mayo. El mal arranque generó conjeturas sobre un posible despido del piloto Dave Martínez y el traspaso de estrellas a mediados de campaña.
Pero los Nacionales se recuperaron. Se ganaron un puesto en los playoffs, eliminaron a los favoritos Dodgers de Los Ángeles en la serie divisional de la Nacional y barrieron a los Cardenales en la serie de campeonato, inspirados por el JMV Howie Kendrick. Para Washington, la ciudad tiene su primera Serie Mundial desde que los Senadores jugaron en 1933.
Los Nacionales habrán tenido una semana de descanso entre partidos, mientras que los Astros solamente tienen dos días libres. El año pasado, Boston tenía dos días más de descanso que Los Ángeles y venció a los Dodgers. Pero antes de eso, los últimos nueve campeones fueron los equipos con menos descanso.
A Martínez no le preocupa eso.
“Estos muchachos han jugado increíblemente. Pienso que necesitaban descansar. Algunos realmente necesitaban descansar”, dijo. “Sanar sus cuerpos un poco”.