El pitcher Shelby Miller ganó el jueves su recurso de arbitraje salarial frente a los Diamondbacks de Arizona, luego de perderse buena parte de la campaña anterior por la ruptura de un ligamento de codo.
Así, los dos casos da arbitraje que se han resuelto hasta ahora han derivado en fallos favorables a los peloteros.
El panel de arbitraje conformado por Robert Herzog, Gary Kendellen y Sylvia Skratek otorgó a Miller un alza de 200.000 dólares, para un salario de 4,9 millones de dólares. La audiencia se realizó el miércoles.
Los Diamondbacks argumentaban que Miller debería conservar el mismo salario que en 2017, cuando perdió el recurso de arbitraje, en el que solicitaba 5,1 millones de dólares.
Ken Giles, cerrador de Houston, y Justin Bour, primera base de Miami, acudieron a audiencias el jueves. Está pendiente también una decisión en el caso de J.T. Realmuto, cátcher de los Marlins, cuyo caso fue atendido el miércoles.
Miller, lanzador derecho de 27 años, tuvo una foja de 2-2 durante cuatro aperturas el año pasado. Se marchó del juego del 23 de abril ante los Dodgers de Los Ángeles, y los Diamondbacks anunciaron cuatro días después que el pitcher presentaba una ruptura parcial del ligamento cubital colateral.
Se sometió a una cirugía el 10 de mayo.
Miller fue elegido al Juego de Estrellas de 2015, cuando jugaba con Atlanta. Tuvo una efectividad de 3.02 pero registró una foja de 6-17, la mayor cantidad de derrotas en las mayores.
Al concluir la campaña, los Bravos lo cedieron a Arizona en un canje que envió a Atlanta al pelotero de cuadro Dansby Swanson, junto con el jardinero venezolano Ender Inciarte y el lanzador Aaron Blair. Miller tuvo un récord de 3-12 y un promedio de carreras limpias admitidas de 6.15 con los Diamondbacks.
El jardinero estelar Mookie Betts se impuso el miércoles a los Medias Rojas de Boston en el arbitraje, y obtuvo un alza de 950.000 dólares, que deja su salario en 10,5 millones, en vez de los 7,5 millones ofrecidos por el club.