Jrue Holiday aportó los puntos. Derrick White añadió un tapón en persecusión. Jayson Tatum y Jaylen Brown contribuyeron, también, con sus pases y su defensa con Celtics.
Los Mavericks se pueden dejar de preocupar en quién es el mejor jugador de Boston. A quien quiera que pongan en el juego está aportando para acercarse a un nuevo campeonato de la NBA, el 18vo sin precedentes en la liga.
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Holiday terminó con 26 puntos y 11 rebotes y White corrió por la cancha para impedir la última oportunidad de Dallas de convertir el juego en uno de una posesión el domingo por la noche cuando los Celtics de Boston venció a los Mavericks 105-98 para tomar una ventaja de 2-0 en las Finales de la NBA.
“Estoy realmente cansado de escuchar sobre un jugador o aquel otro y de todos tratando de hacerlo algo más que el estilo de juego de los Celtics”, dijo el coach de Boston Joe Mazzulla. “Todos quienes pisaron la duela esta noche hicieron jugadas ganadoras de ambos lados”.
Jayson Tatum compensó una mala noche de tiros con 12 asistencias y nueve rebotes. Jaylen Brown anotó 21 puntos, Tatum terminó con 18 y Derrick White también anotó 18 tantos para Boston, primer favorito. Kristaps Porzingis consiguió 12 unidades.
“Por eso son el equipo número uno de la NBA con el mejor récord”, dijo la estrella de los Mavericks, Luka Doncic, quien anotó 32 puntos con 11 rebotes y 11 asistencias, el primer triple-doble de las Finales de la NBA en la historia de la franquicia de Dallas. “Tienen muchos grandes jugadores. Básicamente, cualquiera puede salir”.
