Nick Nurse no sabe exactamente cómo funcionará la configuración de los entrenamientos de los Raptors de Toronto durante la temporada.
Lo que si tiene claro: no será el mayor reto de su carrera.
Habría que remontarse a 30 años, cuando el estratega de los Raptors y reinante Entrenador del Año estaba en Inglaterra al frente de los Derby Rams. Su equipo sólo tenía presupuesto para alquilar la cancha de prácticas los martes y viernes. Y los Ramos sólo podían ingresar a las 7 de la noche debido a que las noches de bádminton nunca terminaban temprano.
“Literalmente llegaba la 7, quitaban la red y entrábamos a la cancha”, recordó Nurse.
No era perfecto, pero Nurse supo cumplir con las exigencias del trabajo.
Por lo pronto, no hay un club de bádminton en Tampa, la ciudad de Florida en la que los Raptors tendrán su sede en la nueva temporada de la NBA.
Toronto iniciará la campaña disputando sus juegos de “casa” en el Amalie Arena, feudo del Lightning de Tampa Bay, campeón de la Copa Stanley de hockey. El plan es que los Raptors entrenen en el auditorio de un hotel cercano cuando se encuentren en Tampa.
La combinación de una itinerante carrera de Nurse como entrenador y el hecho de que los Raptors vienen de una extraña experiencia en la burbuja de la NBA en Walt Disney World convenció al entrenador que este ajuste, aunque no es ideal, puede funcionar.
“He tenido situaciones curiosas”, admitió Nurse al recordar otros ajustes para entrenar que ha tenido en su carrera en Inglaterra, Bélgica y la Liga de Desarrollo de la NBA. “Pero siempre lo diré, sólo llévame a una cancha para entrenar, a los juegos y estaré feliz”.
Los Raptors pasarán esta semana estableciéndose en Tampa. Realizarán su pretemporada hasta el 11 de diciembre en la Universidad Saint Leo, que está media hora al norte de dónde los campeones de 2019 disputarán sus compromisos de local.
Nurse indicó que se está alistando para su nueva rutina en un hotel. Los jugadores y el personal se están preparando para la nueva normalidad, al menos por algunos meses. El gerente general Bobby Webster busca un buen lugar para tomar café.
“Genera una gran presión para nosotros como organización”, admitió Webster. “Pero cuando enfrentamos diferentes retos y obstáculos floreceremos y nos gusta. Entonces lo estamos viendo como una experiencia única para el equipo y el personal”.