Las desventajas de dos dígitos se están convirtiendo apenas en un trámite más que los Celtics han debido resolver mientas continúan con su estupenda racha.
Kyrie Irving brilló con 47 puntos, incluidos 10 en la prórroga, y Boston remontó un déficit de 13 puntos en el cuarto periodo para vencer el lunes 110-102 a los Mavericks de Dallas, con lo que hilvanó su 16to triunfo consecutivo.
La seguidilla de triunfos ha empatado la cuarta más larga en la historia de Boston. Y por tercer encuentro en fila, los Celtics revirtieron una desventaja de al menos 10 unidades.
En contraste con lo ocurrido en los triunfos sobre Golden State y Atlanta, esta victoria requirió de una remontada en el cuarto periodo. Para ello, los Celtics recurrieron a Irving, quien aportó su mejor actuación con su nuevo equipo después de que Dallas se colocó arriba por 87-74 con 7:47 minutos por jugar.
“Para nosotros, simplemente se trata de responder cuando los equipos entran en un ritmo cómodo, ya sea en la primera mitad o en la segunda”, explicó Irving. “Como equipo, sólo seguimos unidos a pesar de todo”.
Los Celtics empataron a 96 cuando Irving robó un balón a Dirk Nowitzki y lo entregó a Jayson Tatum, para un “alley-oop”. La pelota rebotó en el aro durante un segundo antes de entrar.
Irving anotó los primeros seis puntos de su equipo en el tiempo extra. Y después de que Jaylen Brown dio a Boston la delantera por 104-102 con un tiro a 1:39 minutos del final, Irving recibió una falta de Yogi Ferrell mientras intentaba una bandeja, con 48,5 segundos restantes.
Aunque Irving falló el tiro libre, el marcador se colocó en 106-102 y Dallas no pudo acercarse ya.
“No veo realmente que estas situaciones nos presionen”, comentó Irving sobre su jugada en la recta final. “Hombre, sólo estamos jugando al basquetbol. Es como estar en el parque con el marcador 7-7 en un partido donde gana el primer equipo que llegue a ocho”.