Kevin Durant embocó un triple a 45,3 segundos del final y los Warriors de Golden State vencieron el miércoles 118-113 a los Cavaliers de Cleveland, con lo que quedaron a una victoria de una barrida, una venganza, una postemporada perfecta y el título de la NBA.
Durant totalizó 31 puntos y los Warriors tomaron la ventaja por 3-0 en la final.
Golden State estaba en desventaja por seis puntos, cuando restaban tres minutos. Fue entonces cuando Durant, quien decidió dejar las filas de Oklahoma City para ayudar a que los Warriors dieran el paso que les faltó en la final del año pasado, se hizo cargo de la situación.
Anotó 14 puntos en el cuarto periodo.
Con su 15ta victoria consecutiva en postemporada, los Warriors ostentan la mejor racha de la historia en estas instancias dentro de los cuatro deportes principales de Estados Unidos.
Y si gana el cuarto encuentro, previsto para el viernes. Golden State exorcizará los demonios del año pasado, cuando dilapidó una desventaja de 3-1 en la final ante los Cavs.
Ningún equipo se ha recuperado de un déficit de 3-0.