Un terrible suceso de abuso sexual infantil que se daba en Argentina fue descubierto, de la manera menos esperada, cuando la mujer identificada como Carolina Dantola, aprovechando que su pareja sentimental no estaba en la casa, le revisó el celular.
En ese momento se encontró con un video de alto contenido sexual, oculto en la nube de Google, la mujer alcanzó a reconocer la ropa de su hija de 9 años. Además de un short con un estampado particular, momento que se da cuenta de que su pequeña hija es la del video.
Según contó la denunciante, en el video se «ven unos genitales masculinos y otros femeninos que corresponden a los de una nena». «También se muestra un short que yo reconocí que era el de mi hija por un estampado muy particular que tiene», afirmó Carolina.
Abuso sexual a la menor se extendió por un año
«Me pegó una hora y media hasta que llegó la policía»; relató la denunciante sobre el recuerdo de esa noche, en la que terminaron en la comisaría quinta de La Plata, en Argentina. Allí hizo la denuncia por abuso sexual y escuchó por primera vez el calvario que sufría su hija, mientras ella dormía.
Según consta en la declaración, los abusos habrían comenzado en el 2019, y se habrían extendido a lo largo de casi todo un año. La mayoría de las veces, ocurrían de noche, cuando todos dormían.
La menor también fue sometida a pericias médicas y a una cámara especiales, que constataron los abusos sexuales de los que era víctima. «Él se pasaba a la cama de ella o a veces cuando ella venía a dormir a nuestra cama, cuando yo me dormía, él la manoseaba por debajo de las sábanas. Se frotaba su miembro con los genitales de ella»; relató la denunciante.
Incluso en una ocasión, la menor manifestó que le dolían sus partes íntimas, pero cuando Carolina la llevó al pediatra no la revisó y atribuyó el dolor a una causa natural por el desarrollo.
La menor guardaba silencio porque el acusado la amenazaba con que iba a matar a su mamá si ella hablaba. Desde la denuncia, el ultrajante se encuentra con prisión preventiva hasta que sea juzgado. La causa está en manos de la fiscalía número 8 de La Plata en Argentina.