Las fuerzas de seguridad de Honduras este domingo logró la incautación de más de una tonelada de cocaína, en la comunidad de Los Fales, en la zona norte del país. La Secretaría de Seguridad confirmó que los fardos de cocaína estaban enterrados y lo incautaron durante una operación antidrogas en el Caribe del país.
La operación tuvo lugar en un sector del municipio de Iriona, departamento de Colón, donde elementos de la Dirección Nacional Policial Antidrogas (DNPA) junto al Comando de Operaciones Especiales (COE) y Policía de Fronteras decomisaron «alrededor de 58 fardos» de droga, según un informe policial.
El cargamento se trasladará en helicópteros de la Fuerzas Armadas de Honduras hacia las instalaciones de la Secretaría de Seguridad en Tegucigalpa, donde fiscales del Ministerio Público contabilizarán el total de la droga.
Autoridades de Honduras decomisan droga en el caribe
«El peso aproximado del cargamento es de una tonelada y media»; y la droga estaba enterrada a unos tres metros bajo tierra, indicó la Policía hondureña.
Honduras ejecuta de manera unilateral el escudo aéreo; el marítimo tiene apoyo de Estados Unidos a través de un guardacostas en aguas internacionales colindantes con las del país centroamericano en el Caribe. El escudo terrestre lo desarrollan agentes de la Policía Nacional, la Policía Militar de Orden Público y otras instituciones.
Sin embargo, por la posición geográfica el territorio hondureño lo utilizan narcotraficantes internacionales que envían cargamentos; por ejemplo de cocaína, a Estados Unidos. Lo envían en avionetas y embarcaciones rápidas que navegan por el Caribe.
Las autoridades de seguridad hondureñas han incautado unos 3 mil 349 kilos de cocaína en lo que va del año; destruyendo una treintena de pistas clandestinas que usaban narcotraficantes en el país. Entonces «Este se convertiría ya en el caso más fuerte de incautación de cocaína por parte de la Policía Nacional en contra del crimen organizado»; explicó el comisionado Miguel Martínez.
Según cifras oficiales, Honduras decomisó en 2020 más de 14 toneladas de cocaína y 525.125 arbustos de coca, y destruyó ocho laboratorios supuestamente dedicados a procesar drogas.
