La violencia armada en Colombia sigue cobrando vidas, dejando un saldo de ocho personas muertas, entre ellas cinco víctimas de una masacre en el departamento de Antioquia. Este trágico suceso, que se convierte en la masacre número 50 de 2024; tuvo lugar el 30 de septiembre en una zona rural del municipio de Yondó, en el Magdalena Medio.
Este área es objeto de disputas territoriales entre grupos armados, incluidos paramilitares del Clan del Golfo; guerrilleros del ELN y otras organizaciones irregulares.
Las víctimas se encontraban desplazándose por la región cuando fueron atacadas a tiros, un recordatorio escalofriante de la persistente violencia que afecta al país.
Según el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), este incidente se suma a una larga lista de asesinatos que reflejan la gravedad de la situación en varias regiones de Colombia.
Violencia en Colombia deja 8 personas asesinadas
Ese mismo día, en La Guajira, otro hecho violento terminó con la vida de José Ernesto Caicedo Verdecia, un firmante de paz, quien se convirtió en la víctima número 22 del año. A Caicedo lo asesinaron junto a Luisa Fernanda Guerrero Vuelvas, de 25 años; mujer que lo acompañaba en un taxi.
En un incidente separado, a Roxenda Sanguino, una reconocida lideresa social, la encontraron sin vida en el departamento de Bolívar; con múltiples disparos en el rostro. Su asesinato eleva a 123 el número de líderes sociales asesinados en Colombia en lo que va de 2024.
Estos acontecimientos ponen de relieve la grave crisis de seguridad en Colombia; así como la constante amenaza que enfrentan aquellos que luchan por la paz y los derechos humanos en el país. La situación demanda una respuesta urgente y eficaz de las autoridades para proteger a las comunidades y frenar la ola de violencia.