Mortalidad de ballenas jorobadas aumentó en Brasil

Enorme ballena jorobada aparece muerta en una playa de Brasil
Foto:Enorme ballena jorobada aparece muerta en una playa de Brasil /Cortesía

Según reportó la Organización No Gubernamental (ONG) Proyecto Ballena Yubarte, Brasil bate récord de muertes en ballenas jorobadas. Cerca de 131 ballenas han muerto en lo que va de año tras superar el registro de cuatros años atrás.

La más reciente fue encontrada muerta este miércoles en las playas de un lujoso barrio residencial de Rio de Janeiro, una imagen recurrente en diversas playas del país en los últimos meses.

En las playas de Sao Conrado, en la zona sur de Río; unos habitantes que realizaban ejercicios se toparon con la ballena encallada en la arena de cerca de 7 metros de largo.

Una gran parte de estos cetáceos muere en el mar y termina siendo arrastrado por la corriente hasta los arenales. Otros llegan con vida a las playas donde con la ayuda humana logran salvarse algunos, pues; por lo general, mueren.

Bate récord de muertes en ballenas jorobadas

De acuerdo con la ONG, la mayoría de las muertes de estos animales ocurre en el sureño estado de Santa Catarina (42); donde este miércoles 18 de agosto también se encontró una. Le siguen en la lista Sao Paulo (36) y Río (14).

“Hay un aumento de casos y esta tendencia se da porque es una población que está creciendo”, expresó a medios internacionales el coordinador de investigaciones de Proyecto Ballena Yubarte, Milton Marcondes.

“Hay ballenas que mueren por causas naturales. También por actividades humanas, como ser atropelladas por un navío; que terminen atrapadas en una red de pesca o que consuman basura en los mares”, agregó.

Causas posibles de la mortalidad

Algunos estudios avanzados sobre la muerte de estas ballenas realizados este año revelaron que una de las causas posibles es la escasez de krill; un pequeño crustáceo parecido al camarón que le sirve de alimento en la Antártida antes de emprender su migración anual hacia aguas cálidas para reproducirse.

Por esa razón, los investigadores consideran que la mortalidad de las ballenas aumentó como lo hizo en 2010, 2017 y 2018; años donde también disminuyó el krill.

Además, la mayoría de los crustáceos hallados eran muy delgados y jóvenes, entre 1 y 4 años. Esto indica que aún no estaban en edad reproductiva, como el animal encontrado en Río este miércoles.

Telesur