Las graves y espeluznantes heridas que ocasionaron la muerte de 24 ovejas desata el pánico entre los habitantes de varios poblados en Guatemala.
Por lo tanto, los pobladores de las comunidades de Santiago Atitlán, Sololá, San Lucas Tolimán, San José Chacayá y la aldea Los Encuentros, quedaron impactados al ver a sus animales muertos; ya que aseguraron que nunca habían visto heridas así de graves.
Fue tanto el misterio que se desató, que los propietarios decidieron solicitar la intervención del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga) y del Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap) para investigar qué tipo de criatura atacó a los animales y cuidarse de ella.
Tras las denuncias, se determinó que una extraña criatura actuó en tan solo 15 días dejando al menos 24 ovejas muertas y lastimó a una docena más de ellas. Expertos resaltaron que los ataques ocurrieron en zonas boscosas del departamento y lugares cercanos a Chichicastenango, Quiché.
Pánico en varias comunidades de Guatemala
“Hemos entrevistado a los propietarios de las ovejas y nos indican que han encontrado muertos a los animales al amanecer. La veterinaria ha aplicado medicamentos y antibióticos a los animales que quedaron heridos”, uno de los expertos.
Aunado a las investigaciones, los vecinos compartieron fotos y videos con las autoridades del rastro que dejó la extraña criatura; por lo que expertos evaluarán las pruebas para determinar la especie del animal.
En las comunidades afectadas, se esparció el rumor de que los responsables pudieron ser desde un felino, como un tigre hasta un jaguar; pero esta sospecha rápidamente fue descartada, pues no hay indicios que muestran la presencia de los felinos en Guatemala.
No obstante, se señalan dos hipótesis, una apunta que pudieron ser una jauría de perros ferales. Y la segunda que el culpable podría ser un Yaguarundí, una especie de gato desconocida; pero que podría ser la clave de los ataques, pues recientemente fue encontrada una cría de este felino, cerca de las comunidades.
Cabe señalar que no es muy frecuente verlos, pues están en peligro de extinción y por lo mismo, se alejan de las ciudades.
