López Obrador, informó este martes que ha decidido pausar la relación con las embajadas de Estados Unidos y Canadá en México; tras las críticas de sus representantes sobre la reciente reforma al Poder Judicial.
Durante su conferencia matutina, López Obrador aclaró que esta medida no se extiende a los gobiernos de ambos países; sino únicamente a sus embajadores en México, con una mención particular al embajador estadounidense Ken Salazar.
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“La relación con Ken Salazar es buena, pero está en pausa. Vamos a darnos nuestro tiempo”; señaló el mandatario mexicano, aludiendo a que detrás de las declaraciones del embajador Salazar podría estar el Departamento de Estado de Estados Unidos.
López Obrador subrayó la necesidad de que los representantes extranjeros respeten la soberanía de México; destacando que su gobierno no se inmiscuye en los asuntos internos de otras naciones.
López Obrador congela relación diplomática
“Tienen que aprender a respetar la soberanía de México, porque nosotros no vamos a darles consejos allá, ni a decir qué está bien y qué está mal. Queremos que sean respetuosos, que haya una relación recíproca en cuanto a las soberanías”; afirmó.
El presidente explicó que la relación con ambas embajadas se reanudará solo cuando exista una ratificación de que se respetará la independencia de México.
“Que entiendan que fue una imprudencia manifestarse como lo hicieron. Hay cosas que solo atañen a nuestro país”; agregó López Obrador, refiriéndose a los comentarios críticos sobre las reformas.
Tanto Estados Unidos como Canadá han expresado que las modificaciones al Poder Judicial podrían afectar los acuerdos establecidos en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Estas advertencias han generado inquietudes en el sector empresarial, donde se teme que el impacto positivo del nearshoring; una estrategia que busca atraer inversión extranjera a México, podría ser menor al esperado.
A pesar de estas preocupaciones, López Obrador y la exjefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum; han minimizado las advertencias, defendiendo la reforma judicial como un paso necesario para erradicar la corrupción dentro del sistema.
El presidente también presentó una encuesta que muestra que solo el 25% de la población no aprueba la reforma.
La tensión diplomática surge cuando China ha anunciado importantes inversiones en el país azteca, lo que podría influir en el panorama económico y geopolítico de la región.
