Al menos 15 guardias penitenciarios fueron liberados tras un nuevo motín en la Penitenciaría del Litoral, ubicada en las afueras de la ciudad de Guayaquil, Ecuador y epicentro de una sonada crisis de inseguridad carcelaria que sacudió al país recientemente.
Según el informe inicial del Snai, un guía penitenciario atendido en una casa de salud y “se verificó que dos personas privadas de la libertad resultaron heridas”, todos en los brazos. Mientras testigos cercanos a los hechos también escucharon disparos, explosiones y gritos hacia el interior del recinto.
Comandos de élite de la policía intentan retomar el control del centro tras confirmarse enfrentamientos entre residentes de diferentes bloques. Y por el momento han logrado liberar a unos quince guardias que permanecían retenidos.
Crisis de inseguridad carcelaria en Ecuador
También fueron evacuados los familiares que estaban de visita en la penitenciaría, en su mayoría mujeres.
De manera que, el ministro del Interior, Patricio Carrillo, aclaró que el conflicto original fue entre reclusos de los pabellones tres y cuatro.
Por su parte, fuentes no confirmadas en el lugar especulan que el Cartel Nueva Generación de Jalisco es responsable de los disturbios, en rivalidad con otros grupos criminales.
Se ha logrado la evacuación de 15 Agentes de Seguridad Penitenciaria (ASP), por parte de las Unidades Tácticas de la Policía Nacional, que se encontraban retenidas, quienes se encuentran a buen recaudo. pic.twitter.com/Ya8ZAZNGuM
— SNAI Ecuador (@SNAI_Ec) September 3, 2022
Desde 2020 en Ecuador han muerto unos 400 reclusos por hechos de violencia, en pugnas de bandas rivales por la preponderancia y el control interno de las penitenciarías.
Así mismo, en septiembre de 2021, en el Litoral asesinaron a 123 reclusos en situaciones similares; la mayor masacre presidiaria en la historia de la nación, y dos meses más tarde perecieron otros 65.
En la actualidad, la Penitenciaria del Litoral acoge a unas 6.800 reclusos en hacinamiento, dentro de un espacio destinado para albergar sólo a 5.246.
Los hechos ocurren en medio de un censo carcelario que desarrolla el Gobierno de Ecuador para revertir la situación imperante.