Las autoridades de México se enfrentan nuevamente a la cruda realidad de la violencia asociada al tráfico de combustibles, ya que este martes se encontraron nueve cadáveres en las cercanías de un ducto de combustibles en el estado de Querétaro; ubicado en el centro del país.
La macabra escena fue descubierta por los pobladores, quienes alertaron sobre la presencia de dos vehículos en los cuales se encontraban los cuerpos sin signos vitales.
Ángel Rangel, secretario de Seguridad del municipio de San Juan del Río, confirmó la presencia de nueve cadáveres, todos ellos del sexo masculino; y señaló que mostraban evidentes signos de violencia.
Los vehículos en los que se hallaron los cuerpos fueron reportados por los pobladores y estaban cerca de un conjunto habitacional de lujo; atravesado por un ducto de combustibles.
Nuevos crímenes estremecen en México
Querétaro ha sido identificado como un área donde operan bandas criminales especializadas en el tráfico ilícito de gasolina y gas; sustraídos de los ductos de la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex).
Este sombrío descubrimiento resalta la persistente lucha del gobierno mexicano contra las organizaciones criminales involucradas en actividades ilegales relacionadas con los hidrocarburos.
Desde finales de 2006, cuando el gobierno federal lanzó una ofensiva militar controvertida contra los carteles narcotraficantes, también vinculados con el tráfico de combustibles; México ha enfrentado una escalada significativa de la violencia.
Con más de 420,000 asesinatos registrados hasta la fecha, la situación destaca la complejidad y gravedad de los desafíos de seguridad en el país; que persisten a pesar de los esfuerzos gubernamentales por contener la violencia asociada al crimen organizado.