Gobiernos de América Latina y del Caribe respaldan a México tras asalto a su embajada en Quito, Ecuador, el pasado 6 de abril 2024. El gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil), condenó «en los términos más firmes» la medida llevada adelante por el gobierno ecuatoriano hacia la embajada de México; según un comunicado de la cancillería brasileña.
«Toda mi solidaridad con el presidente y amigo (Andrés Manuel) López Obrador»; escribió Lula en la red social X, antes Twitter, donde compartió el comunicado de cancillería.
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Así mismo, la cancillería argentina emitió un comunicado en el que «condena» el asalto a la embajada mexicana en Quito; al tiempo que llama a la «plena observancia» de las disposiciones de la Convención sobre Asilo Diplomático de 1954 y de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.
Por su parte, la cancillería venezolana dijo en un comunicado, que Glas fue capturado «ilegalmente tras haber recibido asilo»; producto de la atroz persecución de la cual ha sido víctima.
Gobiernos de Latinoamérica y del caribe respaldan a México
«Todo esto constituye una acción que ni en las más atroces dictaduras en la región, como la de Augusto Pinochet en Chile o Jorge Rafael Videla en Argentina, se hayan registrado»; dijo el gobierno de Nicolás Maduro en la nota, divulgada en las redes sociales por el canciller venezolano, Yván Gil.
De igual manera, Cuba condenó «de forma enérgica» la «incursión de fuerzas militares de Ecuador».
«Constituye una flagrante violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, al derecho al asilo y a la soberanía de México»; afirmó el canciller cubano, Bruno Rodríguez, en X.
Por su parte, el presidente de Bolivia, Luis Arce, calificó la incursión como un hecho «grave e inaceptable» que «no tiene precedentes en la historia del derecho internacional».
Así mismo, La presidenta de Honduras, Xiomara Castro; dijo que el asalto a la embajada tuvo por objetivo «secuestrar» a Glas y representa un «acto intolerable».
De la misma forma, el gobierno de Chile muestra su solidaridad con México, «ante la inaceptable violación de su soberanía mediante la irrupción de la policía ecuatoriana en la embajada de México en Quito»; escribe en X el presidente de Chile, Gabriel Boric.
Por último, el gobierno panameño, presidido por Laurentino Cortizo, rechazó «el uso de la fuerza como instrumento de negociación diplomática (…) en abierto desafío a los principios fundamentales del derecho internacional y de las relaciones diplomáticas»; según un comunicado de su cancillería.
Junto a Panamá, los gobiernos de Costa Rica y República Dominicana lamentaron en un comunicado conjunto «la inexcusable violación por parte del gobierno de Ecuador de la integridad territorial de la Embajada de México en Quito».