El viernes 23 de agosto, la Ciudad de México fue testigo de un aterrador hallazgo en una de sus avenidas más icónicas: Paseo de la Reforma.
En un edificio situado en la colonia Juárez, dentro de la alcaldía Cuauhtémoc; las autoridades capitalinas descubrieron los cuerpos sin vida de tres personas.
Este hallazgo fue especialmente perturbador, ya que las víctimas eran miembros de una familia de origen extranjero reportada como desaparecida desde principios de agosto.
La Fiscalía General de Justicia de la CDMX ha iniciado una investigación para esclarecer los hechos; pero hasta el momento no se han determinado las causas exactas de la muerte ni el motivo detrás del crimen.
Las identidades de las víctimas no han sido oficialmente confirmadas, aunque todo indica que se trata del empresario Rubén Mancera Gámez; su esposa Sevinch Ergin Kyashifova y su hija Lorena Shukrian Mancera Kyashifova.
Rubén Mancera Gámez, de 60 años, su esposa Sevinch Ergin Kyashifova, de 50 años, y su hija Lorena Shukrian, de 20 años; fueron reportados como desaparecidos desde el pasado 3 de agosto.
Investigación en curso tras terrible hallazgo
Las fichas de búsqueda, compartidas por el reportero Carlos Jiménez, mostraban que la última vez que se les vio fue en la colonia Juárez; la misma zona donde días después se hallaron sus cuerpos.
La descripción de las víctimas coincide con las características de los cuerpos encontrados en el inmueble. Aunque la Fiscalía no ha confirmado oficialmente sus identidades, los detalles revelados hasta ahora sugieren que la familia Mancera fue asesinada en un acto de violencia que ha conmocionado a la capital.
El inmueble donde se encontraron los cuerpos ha sido foco de un conflicto legal, lo que podría ser un elemento clave en el motivo detrás del asesinato. En las imágenes compartidas en redes sociales, se observó una manta en la fachada del edificio que rezaba «Propiedad en litigio, no se deje sorprender». Esta disputa podría haber desencadenado una tragedia, aunque hasta el momento las autoridades no han confirmado esta hipótesis.
La relación entre el conflicto de propiedad y el homicidio es una de las líneas de investigación que sigue la Fiscalía. Sin embargo, todavía hay muchas preguntas sin respuesta, y los detalles sobre los posibles agresores permanecen bajo reserva.
