El partido más esperado de esta fecha FIFA, el Brasil – Argentina, se retrasó justo antes del comienzo por unos graves disturbios en uno de los fondos de la grada de Maracaná, donde se encontraban los aficionados de la albiceleste. Los miembros de seguridad cargaron contra ellos y los jugadores incluso acudieron a poner orden en medio del caos para más tarde marcharse al vestuario.
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Durante el calentamiento de brasileños y argentinos se vio a aficionados de los dos países discutir en la tribuna y poco a poco el ambiente se caldeó hasta que casi cuando ya se iba a producir el saque inicial, la seguridad intentó frenar esa situación con una violenta carga contra los seguidores. Se vieron golpes con las porras y cargas para separar a unos y otros.
Messi da la orden a la selección argentina a retirarse
Todos los internacionales de Argentina acudieron al fondo para proteger a sus aficionados con Messi a la cabeza. Ahí se vio como incluso Dibu Martínez agredía a un miembro de la seguridad. Luego fue el ‘10′ quien mandó a sus compañeros al vestuario con un gesto de claro enfado por el trato que se le había dado a sus compatriotas.
🇦🇷📷 | URGENTE: Messi da la orden a la selección argentina a retirarse del campo de juego en el Maracaná. Esto luego que los policías brasileños agredieran a los hinchas argentinos.#ÚLTIMAHORA pic.twitter.com/sQGJrhHsAH
— TN8 Nicaragua (@canaltn8) November 22, 2023
En la tribuna aún la seguridad cargaba contra algunos aficionados y la disputa del partido se puso en duda mientras madres con sus hijos en brazos abandonaban la tribuna en una situación triste que dará la vuelta al mundo. Lo que ya debía ser un espectáculo sobre el terreno de juego y la pelota en movimiento se convirtió en un nuevo bochorno del fútbol sudamericano.
Cuando los jugadores argentinos se marchaban hacia el vestuario se pudo ver algún gesto de provocación por parte de Brasil. Gabriel Jesus señaló un dos con la mano, en recuerdo a que Argentina también salió de Maracaná en septiembre de 2021. Al regreso a la cancha se vio a un Messi aún muy enojado discutir con Rodrygo en un ambiente muy caldeado al que también se sumó De Paul.
