El Ministerio Público de Honduras anunció que el empresario Daniel Atala es sujeto de investigación por el asesinato de la activista Berta Cáceres en 2016.
En el marco del juicio contra David Castillo, acusado de ser el autor intelectual del asesinato de Cáceres, el tribunal aceptó que Daniel Atala no declare en el juicio. A pesar de que aún no se emite requerimiento fiscal en su contra; denunciaron grupo de activistas.
Atala Midence es gerente financiero de la empresa DESA, propiedad de la familia Atala Zablah; donde David Castillo trabajaba cuando ocurrió el asesinato de la medio ambientalista, que se oponía a un proyecto de la citada compañía, por lo cual hasta recibió varias amenazadas de muerte.
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Una vez que subió al estrado en persona, Atala Midence informó este viernes al tribunal que estaba haciendo uso de su derecho constitucional a no declarar; argumentando que se encuentra bajo investigación.
El empresario fue obligado asistir a declarar en calidad de testigo, propuesto con la intención de demostrar al tribunal la responsabilidad de Castillo en el crimen. Después de que el peritaje de mensajes telefónicos demostrara movimientos de dinero y conversaciones referentes a Berta Cáceres.
Los Atala Zablach, una de las familias más poderosas de Honduras en términos económicos; ejecutaba a través de su empresa Desarrollos Energéticos S.A. (DESA) el proyecto hidroeléctrico Agua Zarca, sobre el río Gualcarque que los indígenas lencas consideran sagrado y vital para su subsistencia.
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En el momento del crimen Castillo se desempeñaba como gerente de DESA.
Los enfrentamientos contra DESA en defensa de la comunidad de Río Blanco terminaron costando la vida a Cáceres (1973-2016).
Durante los próximos días, los abogados representantes de la familia Cáceres presentarán sus pruebas que incluyen no sólo el testimonio de Daniel Atala; sino a tres peritos y el testimonio de la hija de Berta, Bertita Zúniga, entre otros.
Proceso contra Cáceres retrasado
El Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh) denunció que el proceso judicial contra David Castillo, lleva 118 días de retrasos debido a maniobras dilatorias de la defensa.
En noviembre de 2018, cuatro acusados fueron condenados a 34 años por el asesinato de Cáceres y a 16 por el intento de asesinato del ambientalista mexicano Gustavo Castro; único testigo y quien era huésped de la líder indígena el día del crimen.
Otros tres sentenciados a 30 años de cárcel; como coautores del crimen.
Por teleSUR