El Gobierno de Perú declaró en emergencia por dos años el sistema nacional penitenciario y el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) debido al grave problema de hacinamiento en las cárceles del país.
Esta medida fue oficializada a través de un decreto supremo publicado este martes en el diario oficial El Peruano. La declaración tiene como objetivo abordar el déficit de capacidad en los centros penitenciarios y mejorar los servicios de resocialización para las personas privadas de libertad.
La presidenta Dina Boluarte, quien firmó el decreto, explicó que el INPE enfrenta una crisis estructural derivada de la sobrepoblación en las prisiones, que han superado su capacidad de albergue.
Actualmente, Perú cuenta con 69 cárceles, diseñadas para albergar a 41.556 reclusos. Sin embargo, hasta agosto de 2024, el sistema penitenciario mantiene a 98.127 internos, lo que genera una sobrepoblación del 136 %.
Perú declara en emergencia el sistema penitenciario
Esta situación ha causado una serie de problemas adicionales, como la falta de recursos humanos, presupuesto, infraestructura adecuada y servicios básicos para la seguridad y salud de los reclusos.
El Ejecutivo reconoció que esta crisis ha dificultado el proceso de resocialización de los internos, lo que a su vez afecta la rehabilitación y reinserción social de las personas privadas de libertad.
En el decreto, también se establece que en un plazo de 45 días hábiles; el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos presentará una estrategia de emergencia para mejorar la situación del sistema penitenciario.
El Gobierno de Perú busca con esta medida poner en marcha un plan que permita afrontar esta crisis y optimizar la gestión del sistema penitenciario; un paso necesario para garantizar la seguridad y el trato adecuado de los reclusos en el país.