Un grupo de hombres fuertemente armados sembraron el terror en la madrugada de este miércoles durante un asalto a tres bancos que resultó en una persona herida en Mococa, una pequeña ciudad del interior del estado brasileño de Sao Paulo.
Los residentes de la localidad, de unos 70.000 habitantes y localizada a 265 kilómetros de la capital paulista, relataron en las redes sociales que los disparos empezaron alrededor de la 1.00 hora local (4.00 GMT) y se extendieron cerca de una hora.
Según las autoridades, la violenta acción tuvo inicio frente al edificio del batallón de la Policía Militarizada de la ciudad, donde los asaltantes efectuaron diversos disparos que alcanzaron también un centro de salud, dejando un agente de seguridad herido.
"Durante la acción, los involucrados dispararon contra una Unidad de Salud y un guardia del local resultó herido por las astillas de vidrio", explicó la Secretaría de Seguridad Pública paulista en una nota.
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Los delincuentes estaban todos "fuertemente armados" con fusiles y explosivos y, según las informaciones preliminares, consiguieron robar dinero de dos de las tres agencias bancarias atacadas, aunque la Policía todavía desconoce la suma llevada.
Tras los atracos los ladrones dispararon contra diversas tiendas y establecimientos de la ciudad para posteriormente darse a la fuga en vehículos blindados.
Hasta el momento nadie ha sido arrestado por la acción y las Policías Civil y Militarizada continúan con las búsquedas para identificar los sospechosos.
El pasado diciembre dos acciones similares aterrorizaron a los residentes de dos otras pequeñas ciudades brasileñas en menos de 24 horas.
En Criciúma, en el sur del país, un grupo de 30 hombres encapuchados y fuertemente armados protagonizaron un violento atraco a un banco, donde los ladrones tomaron rehenes, bloquearon las calles, incendiaron vehículos y dispararon durante cerca de dos horas.
Un día después, una veintena de hombres armados realizó otro violento asalto, esta vez al norte del país, en Cametá, una ciudad del amazónico estado de Pará, que causó la muerte de una persona y heridas a otra tras ser tomadas como rehenes.