Migrante murió por fracturas en la columna vertebral, dice fiscalía mexicana

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La Fiscalía General del Estado (FGE), en Quintana Roo, México, confirmó que han iniciado acciones penales en contra de cuatro policías involucrados en la muerte de la salvadoreña Victoria Salazar.

Los hechos ocurrieron el sábado por la tarde y se hicieron del conocimiento público ayer por medio de varios vídeos que circularon en las redes sociales.

El fiscal del estado confirmó que las investigaciones iniciales culminaron y establecieron las causas de la muerte de Victoria Salazar, la salvadoreña asesinada por policías en la localidad de Tulum, en el referido estado mexicano.

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“Peritos del Servicio Médico Forense de la Fiscalía General del Estado, después de cumplir con el protocolo médico legal y la práctica de la necropsia a la víctima antes mencionada, concluyeron que se identificó una fractura en la parte superior de la columna vertebral producida por la ruptura de la primera y segunda vértebra, lo que provocó la pérdida de la vida de la víctima”, se puede leer en el comunicado difundido por la FGE.

 

Además, la Fiscalía confirma que las lesiones encontradas en la columna de la víctima coinciden con los puntos donde los policías ejercieron fuerza sobre Victoria, conclusión a la que se llegó por medio del análisis de los distintos vídeos.

Uso desproporcionado de la fuerza 

Asimismo, la institución señaló que hubo un exceso de fuerza en el procedimiento policial, además de que fue desproporcionado, inmoderado y de un alto riesgo para la vida de Victoria, quién falleció en el momento tras sufrir una desaceleración con rotación del cuello.

 

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Por ese motivo, el fiscal del caso ordenó la captura de los cuatro policías involucrados en la muerte de Victoria, quienes fueron trasladados a un centro de detención donde quedarán a la disposición de un juez de control.

“Se aplicará todo el rigor de la ley para que el delito no quede impune y procurar la justicia”, afirmó la Fiscalía mexicana.

El hecho que ha conmocionado en México sucedió la tarde del 27 de marzo en Tulum, Quintana Roo.