El presidente de la Confederación Colombiana de Transportadores de Carga (CCTC), Jorge Ignacio García González, declaró a la prensa que este lunes realizan un paro de camioneros para rechazar el incremento del precio de los peajes y de la cifra de casetas de cobro a lo largo de esa nación.
El líder gremial precisó que se realizarán plantones pacíficos en 12 municipios de ocho departamentos.
En ellos tendrán participación “las asociaciones, agremiaciones y sindicatos que tengan que ver con el transporte de carga”, así como los usuarios de las vías que deseen unirse, dijo.
Se prevé que protestas de este tipo tengan lugar en Bogotá, Medellín, Cartagena, Barranquilla, Villavicencio y otras ciudades, de acuerdo con la convocatoria difundida a través de medios locales y las redes sociales.
Las denuncias
García González argumentó que se han concretado incrementos de hasta 300 por ciento en el precio de circulación por algunas vías. Puso como ejemplos los peajes de La Pintada (Antioquia) y Guachetá (Cundinamarca).
En el primero de ellos antes se pagaba 19.600 pesos colombianos (5.6 dólares estadounidenses) y ahora va a quedar en 66.900 (poco más de 19 dólares).
En Guachetá se pagaba hasta diciembre pasado 20.200 (5.78 dólares) y ahora hay que abonar 42.200 (12 dólares). “Consideramos que es un exabrupto”, manifestó el presidente de la CCTC.
Añadió que en algunos casos se les cobran peajes bastante altos cuando se trata de vías que no están en buenas condiciones.
Así ocurre “en la vía alterna entre Bogotá y Villavicencio” (cabecera del departamento del Meta), cuyo estado calificó de pésimo y donde hay frecuente peligro de derrumbe, agregó.
A juicio del Presidente de la CCTC, la otra arista del problema es el alto número de casetas de cobro de peaje en tramos muy cortos, como sucede en la ruta a La Apartada (localidad al sur del norteño departamento de Córdoba).
Allí “hay tres peajes (…) donde solo son 85 kilómetros, y cada conductor tiene que pagar casi 200.000 pesos (57 dólares)”, se lamentó.
En paralelo, explicó que se ha incrementado el precio de los combustibles. “Estos dos gastos afectan demasiado la canasta de insumos y nosotros no tenemos la remuneración justa para asumir estos costos”, consideró.
Por su parte, el representante de la Asociación Colombiana de Camioneros (ACC), Juan Gabriel Marín, consideró “abusivos” los incrementos y aseveró que “los transportadores están cerca de la bancarrota”.
Indicó que la solución no implica solo reducir los precios de los peajes o del combustible, sino que los costos sean operativos, pues al mismo ritmo en que bajan precios, bajan los fletes, razonó.
Denunció que el Gobierno nacional conoce cómo hacer rentable la actividad, pero “no lo hace porque se afectarían los intereses de los grandes industriales del país”, informó Telesur.
