CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Unos hombres armados que iban en unas motocicletas irrumpieron en una fiesta celebrada el fin de semana y asaltaron a los asistentes, para que unos minutos después regresaran y comenzaran a disparar, provocando la muerte de seis hombres y una mujer, informaron el domingo las autoridades del estado mexicano de Jalisco.
Los fiscales del estado dijeron que el incidente ocurrió el sábado por la noche. Jalisco, en el centro-norte de México, ha albergado desde hace tiempo al Cártel Jalisco Nueva Generación, pero el incidente ocurrió cerca de la frontera con el estado de Zacatecas, donde varias organizaciones de narcotráfico han tenido disputas por el territorio.
Tras el ataque, elementos de la Guardia Nacional (GN) y de la Policía Municipal arribaron al lugar para asegurar el área. No hubo detenidos por este multihomicidio. Del lugar se levantaron decenas de casquillos calibre nueve milímetros.
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El año pasado, Ojuelos fue escenario de varios hechos violentos, en diciembre fueron localizados tres cuerpos calcinados en una parcela del rancho Salitrillo en la comunidad Vaquerías.
Otros ataques
Otro incidente similar ocurrido en una fiesta celebrada en el estado vecino de Michoacán dejó a varias personas heridas. La policía estatal dijo que tres personas armadas comenzaron a disparar contra los asistentes en la ciudad de Uruapan. Los medios locales reportaron que había niños presentes en la fiesta y entre los heridos.
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Aunque las autoridades de la mayoría de los estados mexicanos han pedido no realizar fiestas durante la pandemia de coronavirus, ha habido poca vigilancia. El gobierno federal ha desaconsejado a los estados arrestar o multar a la gente que incurra en ese tipo de conducta.
