Una pelea entre una pareja dejó sin vida a una joven identificada preliminarmente como Paula Mora de aproximadamente 25 años, cuyo cuerpo fue encontrado por Jeannette Díaz, dueña de la casa donde ocurrió el hecho de violencia y madre de un joven de apellido Martínez, quien sería la última persona que estuvo con la ahora fallecida.
El hallazgo se reportó en la vivienda ubicada en Bribrí de Lomas del Río, Pavas de San José, Costa Rica cuando Díaz entró a la sala y encontró a la muchacha tirada en un sillón, boca arriba, con toda su ropa puesta y golpes visibles principalmente en la cara.
De inmediato empezó a hablarle para ver si se despertaba, pero la víctima ya estaba sin vida y por más que buscó a su hijo en la casa nunca lo encontró.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) confirmó que todo apunta a un homicidio por los elementos hallados en la escena, además la propietaria del inmueble les dijo que su hijo había pasado la noche con la muchacha.
Vecinos indicaron que tanto la fallecida como Martínez, en apariencia tenían una relación, ya que normalmente se les veía entrar y salir de la mano de la casa.
Alerta autoridades
La Cruz Roja confirmó que recibió una llamada anónima alertando de los hechos, de manera que se hicieron presentes en el lugar y confirmaron que la mujer presentaba golpes en la cara y pecho, por lo que no se descarta que el sujeto la haya ahorcado.
Tras confirmar que estaba sin vida, dejaron la escena en manos de la Fuerza Pública, quienes aseguraron el perímetro y dieron cuenta al Organismo de Investigación Judicial (OIJ) para que se hicieran cargo de la recolección de indicios y el levantamiento del cuerpo.
Ante tal panorama, DIARIO EXTRA intentó ponerse en contacto con la madre del joven a quien en la localidad señalan como sospechoso para conocerse su versión.
Sin embargo, quien contestó la llamada al celular de la señora fue el propio Martínez, y se le consultó sobre los señalamientos que hay en su contra por la muerte de la mujer, no obstante, se limitó a confirmar que era él a quien estábamos buscando, pero no dijo nada más y se limitó a cortar la llamada.
El hombre atendió una segunda llamada que se hizo al mismo teléfono y nuevamente tras lanzar insultos cortó sin decir nada sobre los cuestionamientos sobre su presunta relación con el homicidio de Mora.
Despliegue en la escena
De igual forma, DIARIO EXTRA se hizo presente a las afueras de la humilde vivienda donde sucedieron los hechos, estructura llena de barandas y cerraduras, al parecer para protegerse del vandalismo, allí este rotativo fue testigo del levantamiento del cuerpo, así como de todo el despliegue policial para tratar de dar con el presunto agresor que, en apariencia, salió de la casa durante la madrugada.
Según información de vecinos allegados a la familia del sospechoso, quienes hablaron con El Periódico del Pueblo, aunque con la reserva de guardar sus nombres por temor a represalias, Martínez se caracterizaba por consumir drogas diariamente, así como tener un comportamiento agresivo, principalmente hacia las mujeres.
Los mismos lugareños indicaron que se le veía con varias mujeres ingresar a la casa, pero que hace solo un mes y medio tenía una relación con una mujer de la zona, con quien tiene un hijo menor de edad, a la que dejó por supuestas agresiones.
Agresivo en casa
El sospechoso de unos 27 años de edad aproximadamente es de contextura alta, está tatuado y es de piel morena, además, de acuerdo con personas que tienen cercanía con la mamá del sujeto, se trata de una persona muy violenta, incluso con la mujer que le dio la vida.
Intentamos conocer la versión de Díaz, pues la comunidad contó que ella le tenía miedo y nunca se atrevió a denunciar, ya que el sujeto la tenía amenazada con sacarla de la casa si interponía una queja formal, pero no fue posible confirmarlo con ella directamente.
Al parecer, el hombre tenía fama en el barrio por ser extrovertido y siempre lucir una nueva pareja sentimental cada semana, a las que llevaba a su casa les daba posada y compartía hasta cuatro días seguidos con ellas.
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Una vecina del sospechoso le manifestó a DIARIO EXTRA que el hombre acostumbraba prohibirles a las mujeres con las que se relacionaba usar redes sociales o bien lucir algún tipo de ropa, ya que su modo de relacionarse sentimentalmente era el de ser controlador y agresivo, en el caso que las femeninas no le correspondieran.
Según conoció este medio, en esa vivienda los vecinos todos los días escuchaban gritos de lamento de la propia madre del sujeto y hasta de otras mujeres con las que compartía, sin embargo, ninguna de las afectadas daba alerta a las autoridades, así como los vecinos, quienes normalizaron los comportamientos de esa humilde vivienda.
