Desde México, el presidente del país, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que desde los Gobiernos de Honduras y Guatemala se escuchó el llamado realizado por el mandatario para frenar la caravana migrante que salió el pasado viernes primero de octubre con destino a Estados Unidos.
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Esto, tras el encuentro de autoridades de Guatemala y Honduras, que, junto a una delegación mexicana de reconocimiento en el río Suchiate, territorio fronterizo, llevaron a cabo para disolver el tránsito migratorio.
El presidente mexicano informó que los integrantes de esta caravana fueron convencidos de que “no hay condiciones sanitarias” para continuar con el movimiento migratorio en medio de la pandemia por la Covid-19.
AMLO, quien resaltó la existencia de “mucha gente necesitada de trabajo” aseguró que ya se están tomando medidas para ofrecerle opciones a los integrantes de esta caravana.
“Nadie sale de su pueblo por gusto, lo hacen por necesidad” afirmó el mandatario mexicano a la par que aseguró, se están tomando medidas para ofrecer opciones a las personas desplazadas.
Por su parte, durante recientes declaraciones, el presidente de Honduras Juan Orlando Hernández, destacó que las medidas de seguridad tanto en Guatemala como en México, incluso, en Estados Unidos "están más estrictas que nunca" para los migrantes.
Riesgos
"Mi consejo a ellos (migrantes) es que la situación en Guatemala, en México o en Estados Unidos está más estricta que nunca; los riesgos a los que se exponen son mucho mayores hoy a raíz de esta pandemia", expuso el mandatario hondureño.
Sin embargo, el ejecutivo coincidió con el mandatario mexicano al asegurar que "existen personas que, haciendo uso del derecho humano a migrar, también aspiran a tener un mejor nivel de vida".
Entre tanto, desde el Gobierno de Guatemala, autoridades hicieron un llamado a la ciudadanía para que no forme parte de “movimientos migratorios irregulares que ponen en riesgo su salud e integridad, así como la de las comunidades por donde transitan.”
Las autoridades guatemaltecas aseguran que ya han retornado parte de los hondureños que ingresaron a su territorio de forma irregular el pasado jueves, asegurando que fueron “mucho menos de 4.000 personas” las que integraron la caravana.
