Río de Janeiro, 16 sep (EFE).- La policía brasileña arrestó a dos de los acusados de asesinar a tiros el domingo a tres miembros de una familia boliviana que vivía en la frontera entre ambos países, luego de que uno de los sospechosos fuera sorprendido cuando violaba a una menor de edad, informaron este miércoles fuentes oficiales.
Los arrestos se produjeron luego de que policías de ambos países localizaron el martes los cuerpos de una mujer y de dos de sus hijos, también menores de edad, que habían sido arrojados en una región boscosa en territorio boliviano.
Los hechos ocurrieron el pasado domingo en una propiedad rural en Ramal do Pelé, una región fronteriza pero en jurisdicción de Acrelandia, municipio del estado brasileño de Acre, según la Policía Militarizada regional.
Trabajo en conjunto
La policía brasileña tuvo que pedir la colaboración de las autoridades de Bolivia debido a que los cuerpos fueron escondidos en una área boscosa próxima al río Abuná, en territorio boliviano.
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Los dos hombres arrestados, que confesaron su responsabilidad en el crimen y están presos en la ciudad brasileña de Plácido de Castro, identificaron como su cómplice a una tercera persona, un menor de edad, que fue declarado prófugo.
El agricultor boliviano Carlos Ribas, que posee una pequeña propiedad en Brasil y es el principal testigo del caso, relató a la Policía que sorprendió a un hombre cuando intentaba violar a su hija, de 14 años, y dijo que consiguió inmovilizarlo y dejarlo atado en un árbol mientras acudía a la comisaría a denunciar el hecho.
Al regresar a su casa, sin embargo, encontró a la menor gravemente herida, con disparos en el cuello y en un brazo, y ningún rastro del resto de sus familiares, así como su casa incendiada.
La adolescente relató que, mientras su padre estaba en la comisaría de Acrelandia, los cómplices del violador se presentaron para rescatarlo y que, tras una discusión, asesinaron a tiros a su madre y a sus dos hermanos y se llevaron sus cuerpos.
Los cuerpos sólo fueron encontrados tras más de un día de búsquedas en ambos lados de la frontera.
"Nunca había visto algo parecido. Tan pronto como nos enteremos de lo ocurrido, movilizamos a todos los agentes y a voluntarios, y solicité apoyo de la Policía Militarizada de Plácido de Castro. Trabajamos en las búsquedas en una región selvática por cerca de 36 horas", afirmó el comisario Danilo César, responsable por la Policía Civil en Acrelandia.
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La investigación permitió establecer que los responsables fueron dos brasileños que se dedicaban a la tala de madera en una propiedad boliviana, uno de los cuales, identificado como José Francisco Mendes de Souza, presenció cuando su compañero era amarrado al árbol por el agricultor y fue a llamar a familiares para que lo ayudaran a rescatarlo.
El autor de la violación, identificado como Gilvani Nascimento da Silva, también fue arrestado.
