Las investigaciones en torno al crimen de la anestesióloga María Luisa Cedeño Quesada continúan arrojando información importante sobre lo sucedido el 20 de julio del 2020 en la habitación 21 del hotel La Mansión Inn en Manuel Antonio, Quepos, Costa Rica.
La víctima, de 43 años, era vecina de San Carlos, trabajaba en un hospital privado de Escazú y su cuerpo estaba desnudo, boca arriba hacia la izquierda y una colcha lo cubría por completo. Fue manipulado lo menos posible por los investigadores, pero dejaba ver que tenía sangre y tres mordiscos en mejilla, antebrazo derecho y seno izquierdo.
Tras el avance de las pesquisas los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) lograron detener al nicaragüense Herrera Martínez, de 38 años, quien vivía desde hace un año y dos meses en el hotel, donde desempeñaba múltiples quehaceres como cocinero, salonero, jardinero y encargado de mantenimiento.
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Fuentes confidenciales aseguraron a DIARIO EXTRA que el ADN de las mordidas que presentaba la doctora no corresponde al dueño del inmueble, ni al otro acusado apellidado Miranda Izquierdo y sería al parecer de Herrera Martínez, quien descuenta 6 meses de prisión preventiva.
Resultados de autopsia
La autopsia decía que los mordiscos eran de una sola persona, después que dos y excluía al nicaragüense, pero ahora todo cambió. Las investigaciones continúan para esclarecer la situación.
#NiUnaMenos La denuncia de los abogados de María Luisa Cedeño es muy seria, y los hechos en sí denotan un ensañamiento brutal de sus femicidas. https://t.co/2nL1oVGNUS
— Antonio Jiménez (@eleditor) September 11, 2020
Bodaan descuenta casa por cárcel en el mismo hotel donde ocurrió el crimen y Miranda Izquierdo 6 meses de prisión preventiva luego de ser detenido en Jacó. El abogado de este último, Simón Angulo, mencionó a El Periódico del Pueblo que la detención se hizo sin pericia.
“Este caso va a representar un cambio profundo en las pericias odontológicas forenses, las cuales deberán ser erradicadas del sistema tal y como se hace a nivel internacional.
Esas pruebas no tienen certeza en contra de una persona para la comparación de un delito, puede incluir a cualquier persona”, explicó.
Las autoridades no descartan que el homicidio obedezca a un tema sexual en que la fallecida luchó hasta lo último para evitar morir asfixiada.