El Ministerio de Salud de Brasil informó este lunes que en las últimas 24 horas se registraron 105 muertes por coronavirus, elevando la cifra de fallecidos por la pandemia en el país sudamericano a 1.328.
Entretanto, 1.261 personas más fueron diagnosticadas con coronavirus, por lo que el número de contagiados asciende a 23.430.
De acuerdo con estos datos oficiales, la letalidad de la pandemia en el gigante sudamericano se ubica en 5,7 %.
Sao Paulo es el estado más afectado, con 8.895 diagnósticos positivos y 608 muertos; seguido de Río de Janeiro, con 3.231 casos confirmados y 188 fallecidos; mientras, Ceará tiene 1.800 infectados y 91 víctimas fatales.
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Entre los cinco estados con más casos, que superan los 1.000 positivos, también están Amazonas, con 1.275 contagios y 71 fallecidos; y Pernambuco, con 1.154 diagnosticados y 102 decesos.
El ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta, ha pedido al Gobierno "una voz única" sobre la pandemia, tras alertar que las contradicciones entre su vocería y la del presidente Jair Bolsonaro en torno al manejo de la crisis del coronavirus, "llevan al brasileño a la duda".
El brasileño "no sabe si escucha al ministro de Salud, si escucha al presidente, a quién escucha", dijo el funcionario.
Las contradicciones entre Mandetta y Bolsonaro se evidencian públicamente. Mientras el mandatario aboga por medidas limitadas, como aplicar confinamiento solo a ancianos y enfermos; el ministro está a favor de la cuarentena horizontal, en la que se someta a toda la población.
Además, este domingo, durante un evento con religiosos vía videoconferencia, Bolsonaro volvió a minimizar la pandemia y dijo que "40 días después, parece que el problema del virus está empezando a desaparecer".
Entretanto, Mandetta ha manifestado que entre mayo y junio, y en algunas regiones incluso julio, se vivirán "días difíciles".
