El gobernador del estado brasileño de Minas Gerais, Romeu Zema, declaró una situación de emergencia en 101 de los 853 municipios y duelo oficial por casi medio centenar de víctimas causadas por las "lluvias históricas" que se registran desde la semana pasada en el sureste.
Al menos 56 personas murieron y 19 están desaparecidas a raíz de las tormentas que golpean el sureste de Brasil, confirmaron este martes autoridades de ese país.
Según informaron las autoridades nacionales y locales, las inundaciones, los deslizamientos de tierra y derrumbes provocaron que en Minas Gerais se registraran 47 decesos, mientas que en Espírito Santo hubo 9 fallecimientos.
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La Defensa Civil de Minas Gerais señala que 65 personas resultaron heridas debido a las tormentas.
El número de personas sin hogar se elevó a 28.043 personas, la mayoría de ellas tuvieron que abandonar sus residencias temporalmente, mientras 4.101 perdieron sus casas en forma definitiva.
Lluvias cobran más víctimas
Las inundaciones en el sureste de Brasil, en el estado de Minas Gerais, son las peores en 110 años.#madeforminds /e pic.twitter.com/ZqO0RpAc4x
— DW Español (@dw_espanol) January 28, 2020
Tres días de duelo
El gobernador de Minas Gerais firmó un decreto declarando una situación de emergencia en 101 municipios. "Con eso, podremos movilizar a las agencias estatales en las acciones de respuesta y rehabilitación", publicó Zema en su página de Facebook.
Zema declaró también "tres días de duelo oficial en el estado" por las víctimas de los recientes desastres naturales.
Las autoridades estiman que las lluvias ya comenzarán a menguar, aunque advierten del riesgo de nuevos deslizamientos en Belo Horizonte, Sabará, Río Acima, Brumadinho, Contagem, Nova Lima, Betim, Ribeirao das Neves e Ibirité.
Río de Janeiro, Minas Gerais y Espírito Santo son los estados afectados por las fuertes precipitaciones registradas desde la semana pasada.
En el estado de Espírito Santo han muerto nueve personas desde el 17 de enero por las fuertes lluvias, mientras que hay 8.777 desalojados y 1.312 damnificados.
El gobierno brasileño decretó el estado de calamidad pública para cuatro municipios en el sur de Espírito Santo debido a los destrozos causados por las lluvias.
