Bogotá, 13 nov (EFE).- Desconocidos asesinaron al escolta de un líder social colombiano en una zona rural del departamento del Chocó, fronterizo con Panamá y donde había sido secuestrado el domingo pasado junto a un compañero suyo, informó este miércoles la Unidad Nacional de Protección (UNP).
La Armada de Colombia halló el cadáver de León Jairo Rendón Ortiz flotando en el río Atrato en cercanías del municipio de Riosucio, que hace parte del Chocó, detalló la UNP en un escueto comunicado.
Según esa unidad, Rendón Ortiz había sido secuestrado junto al también escolta Róbinson Romaña Cuesta el domingo "al parecer por una organización narcotraficante" en el corregimiento (pueblo) de Domingodó, en el municipio chocoano del Carmen del Darién.
Es por ello que las autoridades continúan con la búsqueda de Romaña Cuesta, que es escolta de otro líder social de la región.
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El director de la UNP, Pablo Elías González, condenó el homicidio y pidió a las autoridades capturar a los responsables de tan "execrable crimen".
"La Unidad Nacional de Protección les envía un abrazo de solidaridad a los familiares y amigos del escolta asesinado, quien perdió la vida en cumplimiento de su deber", agregó González.
Ataques a escoltas
El homicidio de Rendón Ortiz ocurre tan solo 10 días después de que el escolta de un líder indígena fuera asesinado por presuntos disidentes de las FARC en el convulso departamento del Cauca (suroeste).
El asesinato del escolta Fabián Eduardo Rivera, que hacía parte del esquema de seguridad del dirigente indígena Bernardo Ciclos, fue perpetrado en el municipio de Suárez y entonces la UNP lamentó "que ahora los violentos no solo atacan a los protegidos sino a sus escoltas".
Según el último informe de Naciones Unidas, publicado en octubre pasado, al menos 52 exguerrilleros de las FARC han sido asesinados este año y hay denuncias de 123 asesinatos de defensores de los derechos humanos y de líderes sociales.
Entre tanto, la ONG Programa Somos Defensores detalló en el "Informe Semestral Enero-Junio 2019" que al menos 59 defensores de derechos humanos fueron asesinados durante el primer semestre de este año en Colombia, lo que significa una reducción del 23 % respecto al mismo periodo de 2018.
