Los líderes de la región se han pronunciado contra el golpe de Estado que se consumó en Bolivia y que llevó a la renuncia del presidente Evo Morales y de su Gabinete.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, expresó su solidaridad con el mandatario de Bolivia, Evo Morales, y denunció un golpe de Estado en contra de este.
El mandatario venezolano aseguró que las mafias fascistas están asaltando el poder en Bolivia, porque no le perdonan a Evo Morales haber llevado la estabilidad política, crecimiento económico y justicia social al pueblo.
"Es un golpe preparado con odio, con saña, con racismo", denunció Maduro, haciendo referencia a las acciones violentas perpetradas por gropos de oposición política de Bolivia que se niegan a reconocer la reelección de Morales.
#EnVivo | Pdte. @NicolasMaduro denuncia que la vida de @evoespueblo está en peligro y llama a los movimientos sociales y gobiernos del mundo a movilizarse en defensa del líder indígena y la democracia boliviana #ElMundoConEvo pic.twitter.com/oXYcd67X2K
— Prensa Presidencial (@PresidencialVen) November 11, 2019
Destacó que la derecha boliviana no ha podido ganarle a Morales a través de las urnas electorales y por eso recurren a acciones antidemocráticas.
Asimismo, repudió el papel de la Organización de Estados Americanos (OEA) que emitió un informe este domingo sobre la auditoría electoral, en el que recomiendan celebrar nuevos comicios, pero no presentaron pruebas contundentes de un supuesto fraude.
"La OEA ha apuñalado a Evo Morales por la espalda y está detrás del golpe de Estado en Bolivia, así lo denuncio ante el mundo", sentenció el presidente Maduro.
#COMUNICADO | Venezuela denuncia el grotesco Golpe de Estado consumado en el Estado Plurinacional de Bolivia contra su Presidente, Evo Morales, y contra la soberanía del pueblo boliviano. La comunidad internacional no debe mantenerse impasible ante este atropello a la democracia. pic.twitter.com/ogXacs3shR
— Jorge Arreaza M (@jaarreaza) November 11, 2019
El exmandatario boliviano aseguró que su renuncia debe dar paso a devolver la paz a Bolivia, frente a las agresiones de la derecha que persiguió de manera racista y discriminatoria a indígenas, mujeres y personas de escasos recursos.