El Gobierno de México informó la muerte de al menos un elemento de la Guardia Nacional durante los enfrentamientos con sicarios en Culiacán, Sinaloa, el pasado jueves 17 de octubre.
El secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, resultó siete elementos de tropa heridos por armas de fuego, un oficial y ocho elementos de tropa retenidos y liberados sin lesiones.
También se informó sobre un policía estatal y dos policías municipales heridos durante los enfrentamientos.
Además, se registraron ocho vehículos militares y un helicóptero con impactos de arma de fuego. Esto, además de ataques contra instalaciones militares.
El titular de la Defensa también informó que fueron liberados 51 presos del penal de Aguaruto, sustrayendo cinco armas largas y dos cortas, "falleciendo un interno que disparó un arma de fuego contra la policía preventiva". De los reos que escaparon, seis ya fueron recapturados.
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Los criminales también agredieron las instalaciones donde viven las familias de los soldados.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, señaló este viernes que respaldó la liberación de Ovidio Guzmán, hijo del "Chapo", tras los hechos violentos y daños civiles que suscitaron en Culiacán, luego de la captura del delincuente.
"No puede valer más la captura de un delincuente que las vidas de las personas (…) se decidió proteger la vida de las personas y yo estuve de acuerdo con eso, porque no se trata de masacres", expresó AMLO en su conferencia matutina.
El mandatario puntualizó que en su Gobierno no hay contubernio con grupos del crimen organizado y no cambiará su política de seguridad por lo que pidió confianza al pueblo de México. "Está bien pintada la raya, la frontera entre delincuencia y autoridades", informó RT.
