Tegucigalpa, 11 oct (EFE).- Las autoridades de protección civil de Honduras extendieron este viernes la alerta verde (preventiva) en seis de los 18 departamentos del país, debido a las fuertes lluvias, que dejan al menos dos menores muertos y más de 700 personas afectadas.
La alerta se extiende por otras 24 en los departamentos de Ocotepeque, Copán, Lempira, Intibucá, Santa Bárbara y Comayagua, en el occidente y centro del país, indicó la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco).
La medida también abarca a varios municipios aledaños a los ríos Chamelecón y Ulúa, los más caudalosos del país centroamericano, uno de los más vulnerables a fenómenos naturales.
Según el Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), los departamentos bajo alerta registran niveles de saturación superior al 60 %.
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El organismo de protección civil y la Comisión Ejecutiva para el Control de Inundaciones del Valle de Sula instaron al comité de emergencia local y municipal a que mantengan activados "planes de contingencia" para disminuir el riesgo por inundaciones.
DOS MUERTES Y MÁS DE 700 PERSONAS AFECTADAS POR LLUVIAS
Dos menores de 5 y 16 años han muerto, y 728 personas han resultado afectadas en las últimas semanas en Honduras por las lluvias, que también han causado el desbordamiento de algunos ríos y deslizamientos.#CholutecaHoy pic.twitter.com/QePHxkLQl8
— Choluteca Hoy (@CholutecaH) October 11, 2019
Las precipitaciones persistirán, así como el riesgo de inundaciones repentinas y el peligro de desplazamientos por los altos niveles de saturación del suelo, de acuerdo a previsiones del Cenaos.
¿Qué significa la alerta verde?
La alerta verde en Honduras significa que se debe dar seguimiento al comportamiento de un fenómeno que pueda resultar en desastre.
Las fuertes lluvias han causado en Honduras dos menores de 5 y 16 años muertos, más de 700 personas afectadas, crecidas de ríos, deslizamientos y daños en carreteras y otras vías de acceso, según la Copeco y el Cuerpo de Bomberos del país.
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Pedro González Ochoa y Katia Sánchez Ordóñez, de 16 y 5 años, respectivamente, murieron en el departamento de Choluteca, fronterizo con Nicaragua, después de ser arrastrados por un río y una quebrada entre los días 6 y 9 de octubre.
En los últimos días, el organismo hondureño ha entregado unas 2.100 libras (unos 955 kilos) de raciones de alimentos a las familias afectadas, que además han recibido kits de higiene, de cocina y de limpieza.
Las autoridades de protección civil han pedido a los pobladores que viven en zonas de riesgo que tomen las medidas de prevención y acaten las instrucciones de la institución.