Un niño hondureño de 13 años de edad fue rescatado el pasado martes cuando se ahogaba en el Río Bravo, frontera entre México y Estados Unidos, mientras sus padres lo observaban.
El dramático rescate fue realizado por agentes de la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos.
Los agentes asignados a la unidad marina de Eagle Pass, que recorrían el Río Bravo a bordo de una lancha neumática, observaron a dos personas que intentaban mantenerse a flote cerca del Puerto de Entrada a Eagle Pass.
Cuando se acercaron, ubicaron a una tercera persona a poca distancia río abajo, se encontraba el jovencito, flotando boca abajo e inmóvil.
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Los agentes sacaron del agua el cuerpo de un adolescente de 13 años de edad, que estaba inconsciente y no respiraba.
El migrante hondureño había permanecido hundido durante más de un minuto.
De inmediato, el comandante de la embarcación de la Patrulla Fronteriza, realizó un RCP, asistido por el tripulante de la embarcación, logrando reanimar al joven, quien, tras lanzar agua de la boca, comenzó a respirar por sí mismo y recuperó la conciencia. Los padres del menor también fueron sacados del agua, informó La Tribuna.
Más migrantes muertos
El fin de semana pasado, cuatro migrantes guatemaltecos, una mujer y tres niños, fueron hallados muertos en las cercanías del Río Bravo. Las madres de dos de los menores permanecen en recuperación en un hospital de EE.UU.
Además, también fueron hallados sin vida Óscar Alberto Martínez, de 25 años, y su hija Angie Valeria, de 1 año 11 meses, en su intento de cruzar el afluente; se espera que este fin de semana próximo lleguen sus cuerpos a El Salvador.
