Un migrante salvadoreño y su hija, de un año y 11 meses, murieron ahogados tras ser arrastrados por la corriente del Río Bravo cuando trataban de cruzar a EE.UU. desde México. La escena, captada el lunes por la periodista Julia Le Duc, fue publicada por el periódico mexicano La Jornada.
La fotografía del padre, de nombre Óscar Alberto Martínez Ramírez, y de la bebé, Valeria, abrazados mientras permanecen boca abajo en el agua, detonaron una oleada de indignación ante la tragedia del fenómeno migratorio.
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El hecho
La historia ocurrió el 23 de junio, cuando una familia de migrantes provenientes de El Salvador intentó cruzar por el río fronterizo que separa la ciudad mexicana de Matamoros (Tamaulipas) y la ciudad estadounidense de Brownsville (Texas).
Tania Vannesa Ávalos, esposa de Óscar y madre de la bebé, relató cómo su marido cruzó el río con Valeria y, tras dejarla en la orilla, quiso volver a por la mujer. Sin embargo, en un instante se dio cuenta de que la pequeña, al ver que él se alejaba, se arrojó al agua. El cabeza de familia se lanzó tras ella y logró sujetarla, pero ambos fueron arrastrados por una fuerte corriente y murieron ahogados en el Río Bravo. A Tania le tocó presenciar el momento en que su esposo y su hija desaparecían en las aguas.
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Sus cadáveres fueron hallados 12 horas después, el lunes 24 de junio, a un kilómetro del Puente Internacional que conecta Matamoros con Brownsville, lugar por el que intentaron cruzar nadando.
Los cuerpos del padre y la niña permanecieron sujetados por la camisa negra que vestía Óscar, quien fue encontrado con el cuello rodeado por el brazo derecho de la bebé.
El mundo se vuelve a impactar | En 2015 fue Aylan Kurdi, de Siria; hoy es Valeria Martínez, de El Salvador. ¿Qué le hace sentir esta situación? https://t.co/VT8JIouk0u pic.twitter.com/z58vsg32RS
— Prensa Libre (@prensa_libre) June 26, 2019
La familia llevaba dos meses esperando turno para realizar su solicitud de asilo a EE.UU., mientras permanecían en el campamento Puerta México, del lado mexicano, soportando temperaturas de hasta 45 grados centígrados. Cansados de esperar y llenos de desesperación, decidieron cruzar el Río Bravo, informó RT.