La mamá de Santiago Méndez Tenorio llegó de un viaje a Nicaragua este domingo y su recibimiento fue realmente inesperado, cuando le avisaron que su hijo había sido asesinado.
Méndez, de 34 años de edad, fue uno de los oficiales de la policía que murió en Pocosol de San Carlos en un hecho que aún se investiga y en el cual murieron dos oficiales más cuando regresaban a su base en Crucitas.
Javier Fernández Tenorio, uno de los 10 hermanos de Santiago, llegó este lunes hasta Medicatura Forense en San Joaquín de Flores para hacer las gestiones para retirar el cuerpo de su pariente.
“Es algo muy doloroso para la familia, mi mamacita vino ayer (domingo) de Nicaragua y recibió esta trágica noticia”, comentó Fernández.
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Fue una de sus hermanas quien le alertó acerca de lo ocurrido mientras se encontraba trabajando en Santa Ana, donde también reside.
“Me llamó mi hermana, me dijo que lo habían matado, después conocía más detalles por otros medios”, recordó Fernández.
El dolor es profundo, ya que Santiago deja a su esposa y dos hijos.
“Estamos descontrolados, no sabemos qué pasó, solo que mi hermano era el chofer de la patrulla y posiblemente cuando lo atacaron se volcó la patrulla”, agregó Fernández.
De momento no se tiene claro cuándo se le podrá dar el último adiós a este oficial, pero sí se le darán todos los honores e incluso la familia pidió despedirlo con el uniforme de policía.
