Gritos desgarradores de una madre avisan muerte de bebé y una pastelera

costa rica

Los gritos de una madre desesperada alertaron a los vecinos de Sabana Larga en Atenas, Alajuela, Costa Rica sobre la trágica muerte de un bebé de 5 meses y una mujer de 24 años luego de que los carros en que viajaban colisionaran.

A la veinteañera la identificaron como Celenia Espinoza Vega, quien era vecina de Barrio Jesús de Atenas.

De acuerdo con el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Espinoza Vega viajaba sola en su vehículo cuando por razones que se desconocen aparentemente perdió el control.

“El hecho fue reportado en el sentido Atenas-Orotina, trascendió que la hoy occisa, quien conducía el vehículo, en circunstancias aún no establecidas habría perdido el control del automotor y se salió de la vía invadiendo el carril contrario por donde venía un vehículo con el cual chocó de frente”, detallaron.

 

En este segundo automotor se trasladaban el menor de edad junto a su mamá y un masculino, quienes solo sufrieron heridas leves.

De inmediato los lugareños alertaron al servicio de emergencias, de donde despacharon las unidades del comité local de Cruz Roja y del Cuerpo de Bomberos.

Hernán Chávez, paramédico, explicó que debido al impacto la veinteañera, quien era pastelera y estaba en la universidad para ser profesional en esa rama, quedó prensada dentro del auto.

“Al parecer uno de los vehículos venía a alta velocidad y derrapa colisionando de costado contra otro. En uno venían tres personas, en el segundo venía una femenina de 24 años, la misma queda prensada dentro de la estructura falleciendo en el lugar”, sostuvo.

Chávez agregó que el bebé al parecer salió expulsado luego de la colisión y después de estabilizarlo lo subieron a una ambulancia, que metros después hizo trasbordo en una de soporte avanzado en que lo llevaron al hospital de Alajuela, donde pese al esfuerzo de los médicos falleció.

Asimismo, a la madre del pequeño la trasladaron en categoría roja al mismo centro médico, mientras que el padre ingresó en condición amarilla.

 

Aparentemente la familia viajaba en el Hyundai Veloster GLS 2013, color gris y con placas BDZ-900, que aparece registrado a nombre de una mujer de apellidos Vega Ugalde. Del otro carro solo se supo que es un Yaris blanco.

Según manifestaron los lugareños a este medio en esa zona son frecuentes los accidentes de tránsito.

Los cuerpos de la veinteañera y el menor fueron levantados por los agentes judiciales, quienes los trasladaron a la morgue judicial, donde les realizaron la respectiva autopsia.

El caso continúa en investigación para determinar con exactitud las circunstancias que mediaron en la tragedia.

INTENTARON AYUDAR 

Al escuchar el estruendo y posteriormente los gritos de la mamá del pequeño, una mujer de apellidos Navarrete Pérez, los lugareños salieron corriendo para ver qué había pasado y se encontraron con la tragedia.

Loreana Campos es una de las lugareñas que estuvieron en la escena y según contó el bebé iba en la silla de seguridad, pero a pesar de esto no reaccionaba.

“Ya nos estábamos preparando para dormir y cuando escuchamos el estruendo. La mamá pegaba gritos, pedía ayuda, que llamaran una ambulancia, cuando yo llegué el bebé ya estaba fuera de la silla, la mamá lo tenía entre los asientos haciéndole primeros auxilios”, detalló.

Agregó que en el otro carro no se escuchaba a ninguna persona pedir auxilio y en apariencia los vidrios eran oscuros, por lo que no podían observar nada.

En ese momento fue cuando llegaron los cruzrojistas y se enteraron de que solo viajaba la veinteañera, quien debido a las lesiones que sufrió ya no tenía signos vitales.

“El otro carro llevaba vidrios oscuros, entonces no se notaba si había más personas, no sabíamos. No se escuchaba nada, no pedían auxilio ni nada. Luego llegó la ambulancia, sacaron herramientas para sacar a la muchacha por si estaba prensada, pero ya luego dijeron que estaba fallecida”, reiteró.

“IBA A COMER Y DARSE UNA VUELTA”

DIARIO EXTRA conversó con Arnoldo Vega Ugalde, tío de Celenia Espinoza Vega, quien contó que minutos antes del accidente la veinteañera había ido a recoger a su madre en una actividad cerca del centro de Atenas.

“Primero fue a recoger a la mamá que estaba en una actividad llegando a Atenas. Luego se vinieron y le dijo a la mamá que iba al centro a comerse algo, a darse una vuelta y sucedió lo peor”, relató.

De acuerdo con Vega Ulate, Espinoza Vega estudiaba repostería pues esta era una de sus pasiones y la recordó como una joven esforzada.

“Ella era muy buena persona, humilde, ya iba bastante avanzada en la carrera. Nosotros somos una familia muy grande, tengo muchos sobrinos y nos llevamos bien. Todos vivimos acá en el mismo lugar y estos son golpes bastante difíciles”, expresó.

La veinteañera tenía tres hermanos con quienes vivía junto a su mamá, pues años atrás tuvo que enfrentar la muerte de su padre.

Respecto a cómo se enteraron de la tragedia, Vega Ulate detalló que uno de sus hijos recibió una llamada en que le informaron lo ocurrido, siendo que en ese momento decidieron trasladarse hasta donde sus allegados para enfrentar el dolor juntos.

El cuerpo de Espinoza Vega lo velaron este lunes en la casa de su familia y las honras fúnebres serán hoy martes en el cementerio de la zona.