La justicia de Nicaragua no tuvo ninguna duda para declarar culpable a Moisés Francisco Sándigo Fernández por el homicidio de un empresario hotelero y sus dos hijos, ocurrido el 9 de febrero de 2013 en La Fortuna de San Carlos, Costa Rica.
Las pruebas que en su momento fueron consideradas como insuficientes por las autoridades ticas para dictar una condena en el 2014 y 2016 terminaron por convertirse en piezas claves en Nicaragua, donde finalmente hubo justicia para los costarricenses Geovanny Soto Ruiz, de 52 años, y sus hijos Mauricio y Emmanuel, de 29 y 20 años.
“La juez Adela Cardoza dijo que los hechos acusados fueron debidamente probados porque en juicio declararon expertos forenses y del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Costa Rica (a través de videoconferencias). También fueron presentados 62 documentos del caso”.
Pruebas revisadas
Una de las pruebas fue el testimonio de un agente del OIJ de apellido González, quien durante el primer juicio (2014) que se realizó en Costa Rica contra Sándigo y otro sujeto de apellido López (quien fue dejado en libertad) contó que al momento de capturar a Moisés hallaron una pistola envuelta en un pañuelo rojo, con el cual se habría tapado la cara después de cometer el crimen.
Esta pistola coincidía con tres plomazos que los investigadores encontraron en un tronco que estaba dentro de una finca cercana a donde ocurrió el triple homicidio. En apariencia los gatilleros estuvieron probando el arma y afinando el pulso.
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Otra de las pruebas que habría sido analizada fue un informe hecho por la Policía Judicial tica sobre las huellas dactilares halladas dentro de un vehículo en el que fue encontrado el cuerpo de Emmanuel, camino a la catarata del río La Fortuna, pues en apariencia coincidían con las de Sándigo.
Los desalmados primero llevaron a las víctimas al hotel Mountain Paradise, propiedad de la familia, donde robaron varios objetos de valor y finalmente los llevaron hasta un sendero junto al río Arenal, en La Palma de La Fortuna, donde los asesinaron de varias puñaladas y balazos.
La Fiscalía de Nicaragua pidió 129 años de cárcel contra Sándigo, pero será hasta el próximo 16 de mayo que se dé a conocer la condena final.