Fuentes policiales reportaron la muerte de un niño de dos años de edad en Apopa, El Salvador.
Inicialmente se manejó como una muerte natural, pero la autopsia practicada por el Instituto de Medicina Legal (IML), reveló que el infante fue brutalmente golpeado, las primeras investigaciones señalan como responsable a su padrastro, un pandillero.
Una fuente policial detalló que el hecho ocurrió el sábado seis de abril en la colonia Santa Teresa de las Flores, de Apopa. La madre había salido cuando el pandillero regañó al niño por algo, pero trascendió del regaño y terminó con una brutal paliza. El menor ha sido identificado únicamente como Dilan C.
Luego de matarlo, el sujeto decidió no alertar a la Policía ni a la Fiscalía General de la República (FGR) y llamó directamente a una funeraria alegando que había sido una muerte natural.
Sin embargo, por tratarse de un menor de edad, la funeraria llamó a las autoridades y el Instituto de Medicina Legal (IML) realizó la autopsia y en ella se reveló que no era natural, sino que la causa de muerte había sido Politraumatismo Contuso, es decir; murió luego de una severa golpiza.
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En el examen practicado por las autoridades se especifica que algunos de los golpes que presentó el cadáver del niño podrían ser de objetos contundentes pero no se detalló con cuáles.
Aunque en las pesquisas en el hogar del menor se encontró un bate, por lo que se presume que ese objeto pudo haber sido usado para golpear salvajemente al menor.
La Policía Nacional Civil (PNC) confirmó que el caso se encuentra aún en investigaciones.
