La cifra de muertos tras el tornado que azotó La Habana la semana pasada subió a seis, luego del reciente fallecimiento de dos heridos graves, informó el gobierno.
De acuerdo con el ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, "lamentablemente fallecieron dos personas de las 13 que se encontraban en estado grave como consecuencia de las lesiones sufridas durante el fenómeno climatológico", consigna este domingo la prensa oficial. La última cifra oficial de fallecidos era de cuatro.
A una semana de la emergencia, brigadas del gobierno y de ciudadanos voluntarios han logrado remover la mayor parte de escombros y la energía eléctrica se ha restablecido en casi la totalidad. Los servicios telefónicos en los barrios afectados han sido reconectados en un 65%.
Un tornado con velocidad de giro de 322 km/h golpeó la noche del 27 de enero parte de La Habana, afectando los municipios de Regla, Guanabacoa, San Miguel del Padrón y 10 de octubre. El tornado, de categoría EF 4 (la máxima es EF 5), recorrió una distancia de 11,5 km a una velocidad de desplazamiento de 42,5 km/h. En su paso desbarató casas, volteó automóviles, arrancó postes y árboles, dejando varias calles devastadas.
- Te puede interesar: Sube a 14 el número de fallecidos por derrumbes en una carretera de Bolivia
El ministro de la Construcción, René Mesa Villafaña, informó que 3.513 casas han sido contabilizadas como dañadas, pero que ya se iniciaron las reconstrucciones. Las partes turísticas de la capital no sufrieron daños.
Hablar con la gente, ponerle la mano en el hombro, preguntar, alentar, resolver. Eso está haciendo ahora mismo nuestro Presidente @DiazCanelB. La devastación es mucha, pero nos levantaremos. Nadie quedará desamparado, asegura, mientras camina por allí, donde el #Tornado se ensañó pic.twitter.com/CKlITpAstX
— Leticia Martínez Hernández ?? ?? (@leticiadeCuba) January 31, 2019
Este domingo, operarios de la compañía de electricidad y de teléfonos reponían postes y cables, en medio de decenas de viviendas que aún presentan severos daños, la mayoría de ellas sin techo. Los afectados recibían en sus viviendas ayuda humanitaria de ciudadanos particulares que se organizaban en caravanas. Las zonas dañadas son resguardadas por la policía.
Cientos de personas se han movilizado a través de redes sociales para hacer llegar alimentos, vestimenta, medicinas y artículos de limpieza a los damnificados.
