HARTFORD, Connecticut, EE.UU. (AP) — Más de 130 personas que dicen que fueron abusadas sexualmente siendo niños en una ahora cerrada escuela benéfica en Haití llegaron a un acuerdo por 60 millones de dólares con una universidad jesuita en Connecticut y otros demandados.
El acuerdo fue anunciado el viernes y debe ser aprobado por un juez federal en Hartford.
Entre los acusados está la Universidad de Fairfield, la Compañía de Jesús de Nueva Inglaterra, la Orden de Malta y el Haiti Fund Inc., que apoyó financieramente a la escuela haitiana.
Uno de los fundadores del proyecto escolar Pierre Toussaint para niños sin hogar en Cabo Haitiano, Douglas Perlitz, cumple con una sentencia de 20 años en prisión por abusar sexualmente de niños estudiantes.
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Autoridades de la Universidad de Fairfield dijeron que la institución no operaba la escuela en Haití, pero decidió llegar a un acuerdo en la demanda para evitar que las víctimas pasaran por juicios dolorosos.
El abuso sexual infantil es la conducta en la que una niña o niño es utilizado como objeto sexual por parte de una persona con la que mantiene una relación asimétrica, de desigualdad, con respecto a la edad, la madurez y el poder.
En la mayoría de los casos el abuso sexual es una experiencia traumática. La niña o niño lo vive como un atentado contra su integridad física y psicológica. Puede afectar a su desarrollo psicoemocional, así como su respuesta sexual en la vida adulta, por lo que se considera un tipo de maltrato infantil.
Las respuestas psicoemocionales y secuelas en niñas y niños pueden ser similares a las que se observan en casos de maltrato físico, abandono emocional, etc. La mayoría de las víctimas requieren apoyo psicológico para evitar sufrir secuelas del abuso en su vida adulta.