Quito, 17 ene (EFE).- Tres jóvenes han sido puestos bajo prisión preventiva (con fines de investigación) al ser acusados por una supuesta agresión sexual a una joven de 35 años, el pasado domingo en el norte de la capital ecuatoriana.
La Fiscalía de la provincia de Pichincha (cuya capital es Quito) informó hoy a Efe que la audiencia de formulación de cargos contra Juan Andrés M. y los hermanos Jhon Alexander y Danny Paúl C., se llevó a cabo el pasado lunes y que fueron acusados por el delito de violación.
En esa audiencia, la Fiscalía presentó como pruebas del delito la denuncia del padre de la víctima, el parte con la detención policial de los presuntos autores del delito, las versiones de tres personas que encontraron a la joven y el examen psicológico de la mujer agredida donde se manifiesta que, tras tomarse dos bebidas, quedó en estado de inconsciencia, entre otras.
Con estas evidencias, fuentes del Ministerio Público indicaron que el juez de la causa dictó la prisión preventiva para los acusados y otorgó medidas de protección para la víctima.
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Esas medidas cautelares son la prohibición a los procesados de ejercer actos de persecución o intimidación hacia la mujer y su familia, tanto por sí mismos como por terceros; la emisión de una boleta de auxilio en favor de la víctima y sus familiares, y el tratamiento que ésta recibirá, añadió.
Asimismo, la Fiscalía precisó que ayer comenzó el proceso de instrucción fiscal que, por tratarse de un delito grave, durará 30 días en los que se analizarán las pruebas y evidencias obtenidas por los agentes del orden que acudieron al lugar de los hechos.
"Tras este periodo, la Fiscalía pide audiencia preparatoria de juicio y presenta las pruebas obtenidas. Después, el juez decidirá si llama o no a juicio con las evidencias de que dispone", explicaron las mismas fuentes.
Los hechos tuvieron lugar en la tarde del 13 de enero, cuando tres personas encontraron a la joven en el baño del segundo piso de un bar en el sector de Jipijapa, en el norte de Quito, completamente desnuda, inconsciente y mojada, con signos de haber sido agredida sexualmente, así como a los tres acusados, con síntomas de embriaguez.
El dueño del lugar fue el que llamó a la Policía, que acudió al lugar, detuvo a los tres sujetos y llevó a la mujer a un centro hospitalario de la ciudad.
