Santiago de Chile, 18 nov (EFE).- El Gobierno chileno admitió hoy que un carabinero destruyó imágenes clave para esclarecer la muerte de un comunero mapuche el pasado miércoles durante un operativo policial en la sureña región de La Araucanía.
El ministro del Interior, Andrés Chadwick, dijo a los periodistas que el General Director de Carabineros, Hermes Soto, le informó que un miembro de la patrulla implicada en los hechos no sólo eliminó las imágenes, sino que también borró la memoria de la cámara.
Camilo Catrillanca, de 24 años, murió mientras conducía un tractor en la comunidad de Temucuicui, en la sureña región de La Araucanía, donde fuerzas de carabineros se enfrentaban a tiros con unos ladrones de automóviles a los que perseguían.
Hasta ahora, la institución había negado tener imágenes del incidente, argumentando que por la premura de la acción, los carabineros no habían alcanzado a instalar las cámaras que habitualmente llevan en sus cascos.
"Se ha podido comprobar que uno de los miembros del GOPE que llegó a los hechos donde se produce la muerte del joven Catrillanca, que inicialmente había señalado que no tenía ni contaba con una cámara de vigilancia, sí la tenía" dijo Chadwick.
??? Protestas en Chile por la muerte del comunero mapuche Camilo Catrillanca (Hilo). pic.twitter.com/qYoLCg0Io1
— Descifrando la Guerra (@descifraguerra) November 18, 2018
"Esa cámara de vigilancia, que se negó en su momento, y más grave aún, que la tarjeta de memoria de esa cámara, la destruyó. Eso no lo vamos a tolerar", enfatizó.
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"No vamos a tolerar ninguna situación que signifique transgredir la ley, las normas institucionales, los protocolos de acción de Carabineros", subrayó y dijo que el jefe de Orden y Seguridad de La Araucanía, general Mauro Victoriano Krebs, y el prefecto de Fuerzas Especiales, coronel Iván Contreras, presentaron su renuncia por responsabilidad de mando, la cual fue acogida.
Añadió que además se inició un proceso para dar de baja a los cuatro efectivos que llegaron al lugar por haber mentido sobre las cámaras de vigilancia.
Según fuentes del caso, fue clave para llegar a la verdad el testimonio de un niño de 15 años que acompañaba a Camilo Catrillanca en el momento de su muerte, que aseguró haber visto a uno de los carabineros manipulando la cámara.
