Completamente indignados están los habitantes de Saltillo, al norte de México, luego que se difundiera información de la muerte de un niño quien pereció luego que sus padres lo obligaran a comer excremento.
El menor de edad, de tan solo 8 años de iniciales L.Y., murió por negligencia de sus padres, quienes le obligaron a comer mucho excremento, según información del medio mexicano Vanguardia.
Los desgraciados padres fueron identificados como Jacinto y Olga Leticia Moreno Zapata, quienes le dieron de comer excremento a su hijo, quien tras digerir de manera obligada las heces, sufrió una serie de vómitos que lo dejó moribundo.
El cruel hecho sucedió en Saltillo, capital del estado de Coahuila de Zaragoza, en México.
Según informes de medios de comunicación mexicanos, los padres del niño al ver que se descompuso le dieron leche y caldo de pollo, pero los vómitos continuaron hasta que su cuerpo no resistió y falleció.
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Tras desvanecerse el menor, los padres decidieron llevarlo a los bomberos de la zona y los paramédicos solo pudieron confirmar su muerte, destacó Ojo.
Aunque los padres fueron culpables directo de la muerte de su hijo, ya que el examen forense concluyó que el estómago del menor contenía excremento, fueron liberados por la policía.
Ante la liberación de los perversos padres del niño los familiares exigieron a las autoridades que se haga justicia por el crimen cometido.
Un estudio difundido por el Consejo Ciudadano de la Ciudad de México reveló que los niños de entre dos y cinco años de edad son los más propensos a ser víctimas de abuso sexual o maltrato infantil.
Según el análisis del organismo civil los agresores están en su circulo más cercano y muchas veces son sus padrastros, abuelos, maestros y, en menor porcentaje, los propios hermanos.
