San José, 2 oct (EFE).- La reforma fiscal que estudia el Congreso de Costa Rica mantendrá la exoneración al Impuesto al Valor Agregado (IVA) para las compras de las zonas francas en el mercado local, algo que las empresas celebraron hoy al considerarlo como un mensaje de estabilidad y seguridad jurídica.
El Plenario del Congreso mantuvo la exoneración del IVA a la zonas francas como parte del proceso de discusión de 368 mociones al proyecto de reforma fiscal que lleva a cabo esta semana, que es el paso previo a la primera votación de la iniciativa de ley.
"No cambia en nada los incentivos que reciben actualmente las empresas amparadas al Régimen de Zonas Francas, es decir, se mantiene igual y eso significa estabilidad y seguridad jurídica para el régimen y da una buena señal para seguir atrayendo inversión extranjera", dijo hoy en un comunicado el presidente de la Asociación de Zonas Francas de Costa Rica (Azofras), Jorge Brenes.
En la actualidad las zonas francas están exentas del pago del impuesto de ventas en sus compras a proveedores locales.
La reforma fiscal que se discute en el Congreso convertirá el impuesto de ventas del 13 % en el IVA de la misma tasa, pero que gravará los servicios y una serie de productos, muchos de manera diferenciada, que en la actualidad están exentos.
Brenes aseguró que la exoneración favorece al productor nacional, pues se trata de un incentivo para que las empresas situadas en zonas francas compren localmente y fortalezcan los encadenamientos productivos.
"Si se afecta el incentivo a las compras locales que efectúan las empresas de zona franca se favorecería que, en lugar de comprar a empresas costarricenses, se importen los bienes y servicios que son requeridos", indicó Brenes.
Los datos de la Azofras indican que las zonas francas generan más de 100.000 empleos directos y 50.000 mediante los encadenamientos productivos, en su mayoría con pequeñas, medianas y grandes empresas.
Números oficiales dan cuenta de que unas 350 empresas amparadas al régimen de zonas francas general anualmente 4.030 millones de dólares, equivalentes al 7 % del Producto Interno Bruto del país.
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El proyecto de reforma fiscal ha generado el rechazo de los sindicatos del sector público que hoy cumplen 23 días de una huelga, pues consideran que la iniciativa tributaria beneficia a las grandes empresas y sectores adinerados, y afecta en mayor medida a los pobres y clases medias.
Entre las exigencias de los sindicatos se encuentra que las zonas francas y las cooperativas fueran gravadas con el IVA.