Un joven de 27 años de edad, identificado como Joel Antonio Alfaro, murió al ser impactado por un rayo en Santa Isabel Ishuatán, Sonsonate, durante la fuerte lluvia que sorprendió a los salvadoreños la noche de este miércoles, según informó Protección Civil.
Junto al joven resultaron heridas dos personas que no habían sido identificadas.
La torrencial lluvia provocó que las calles de San Salvador terminaran inundadas anoche. Usuarios reportaron el anegamiento de agua en la 49 avenida Sur de San Salvador y la diagonal Cipactly frente al Instituto Francisco Menéndez (Inframen) de la capital.
La alcaldía muncipal de San Salvador también registró la caída de un árbol en la colonia Roma y la misma 49 avenida Sur; personal de Protección Civil y la comuna trabajaron para retirarlo.
También registraron árboles caídos y calles obstruidas en la carretera Panamericana, en jurisdicciones de Usulután, San Vicente, especialmente en la calle hacia Mercedes Umaña y Verapaz, respectivamente.
Anoche, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) registró la caída de 44 milímetros de agua lluvia en El Boquerón; las lluvias se ubicaron, principalmente, en la zona volcánica y costera, destacó El Mundo.
Cabe destacar que hace menos de una semana, una mujer nicaragüense murió al ser alcanzada por un rayo durante una fuerte tormenta eléctrica en el departamento hondureño de Gracias a Dios, fronterizo entre Honduras y Nicaragua, informó el Cuerpo de Bomberos del país.
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El temporal provocó la muerte de la nicaragüense Sara Briaman Rodríguez, de 32 años, quien fue alcanzada por el rayo en Puerto Lempira, cabecera de Gracias a Dios, este hondureño, según un informe del Cuerpo de Bomberos de Honduras.
Rodríguez fue impactada por el rayo cuando estaba sentada en una llanta que tenía en su interior la base de una silla metálica en un sector de Puerto Lempira, donde estaba con sus dos hijos, quienes resultaron ilesos.
Las autoridades hondureñas informaron de que la mujer fue trasladada a un centro hospitalario, pero ya había fallecido, por lo que su cuerpo fue entregado a su esposo, un hondureño no identificado.